Ángel Di María y Ousmane Dembélé revientan hoy el mercado, sorpresón
El PSG se mete de lleno en la operación y puede incluso perjudicar al Real Madrid
Cuando Leonardo, director deportivo del PSG, y Nasser Al-Khelaifi metieron a última hora de ayer al equipo de la capital francesa en la pelea por Ousmane Dembélé, indudablemente ya estaban pensando en la temporada que viene y en la posible marcha de Kylian Mbappé. La operación para los franceses es un chollo, ya que sería muy barata, por un jugador de lo más desequilibrante que existe en el mercado, y por tanto ruinosa para el Barça, pero tiene una lectura doble desmotivante para los hinchas del Parque de los Príncipes.
Es inequívoco que en la primera de estas últimas cabe introducir el hecho de empezar a reforzar la plantilla de Mauricio Pochettino de cara a la más que probable marcha del 10 de Les Bleus al Real Madrid una vez acabe la temporada y el mismo Mbappé finalice su vinculación con el Paris Saint-Germain, lo cual es un golpe anímico para el PSG; pero por otro hay quien en Francia asegura que el Barça, pendiente de deshacerse de Dembélé a toda costa pero sin nada que perder habría dado un vuelco al posible acuerdo.
Sobre ello cabe decir que 24 horas es poco tiempo para formalizar un fichaje estelar desde cero, ya que han de moverse cantidades, fichas, acuerdos con intermediarios y sobre todo entre clubs, etcétera; aunque más lo complica todavía la petición del Barça por encima de esos 20 kilos en los que se había fijado la operación (recordemos que Dembélé le costó al Barça 140 millones de euros oficiales, de ahí que incidamos en lo ruinoso de la transacción con El Mosquito para el Barça), que no es otra que Ángel Di María, interior del PSG.
El ex del Real Madrid siempre ha gustado en Can Barça y a todas luces sería un fichaje excepcional pese a su veteranía para el Camp Nou, ya que cumple a la perfección (seguramente en mucha mayor medida que el propio Dembélé) con la doble función de atacante con verticalidad, desborde y vértigo y, a la vez, capacidad de sacrificio defensivo y trabajo en la presión sobre el adversario, y es por eso que Xavi, sabedor de las cualidades y la polivalencia de El Fideo, unido al hecho de que el jugador carecería de hueco en el PSG si aterriza allí Dembélé, quiere el intercambio. La propuesta está lista y podría precipitarse, aunque Di María es uno de los jugadores más queridos por la grada parisina…