Al-Khelaïfi y el PSG fallan en su trampa a Mbappé: volteo instantáneo al culebrón por Luis Enrique
La estrella francesa salió seriamente contrariada de su duelo con el Niza
Nasser Al-Khelaïfi y el Paris Saint-Germain han ido ganando cada una de las batallas que le ha presentado el reto de conservar a Kylian Mbappé, pero pese a que han vencido por el momento a su gran rival en este asunto, el Real Madrid, la guerra continua y su última trampa preparada para mantener en París al 7 de Bondy le ha salido rana. Es más, el culebrón toca de cerca el inicio de Luis Enrique y se recrudece, y lo hace hasta tal punto que el futuro del crack vuelve a azotar el avispero.
Líder y capitán
Con 24 años y siendo una estrella de talla mundial, a Mbappé le falta la confirmación (no así en su selección), esa que solo da la competitividad en la Champions League y la teórica supremacía (por potencial económico y deportivo) en la Ligue 1, y lejos de acercarse a sendos objetivos, el PSG dio otro paso atrás más este pasado fin de semana en su derrota ante el Niza (2-3), donde el 10 de les bleus marcó los dos tantos de los parisinos.
La estrategia de Al-Khelaïfi y Qatar con Mbappé es clara, estirar los tiempos y a la vez ganar espacio para volver a convencer al jugador con otro supercontrato; todo ello dándole las llaves del proyecto. Pero hay algo que falla, el jugador duda de esto último, y lo de Niza solo es un capítulo más de un largo serial de desdichas. El PSG de Luis Enrique, como el de Galtier o Pochettino, no convence; no lo hace en la Ligue 1 y por supuesto no lo hace de cara a la Liga de Campeones, y si este no prospera la idea de no renovar de Mbappé -que ya es pétrea- se hará tan sólida como una roca.
Dicho de otra forma, no hay nada que le pueda venir mejor al Real Madrid con el asunto Mbappé -y, por ende, peor para los intereses del PSG- que los fracasos del equipo de Luis Enrique. Porque Mbappé no quiere ser el líder de un equipo que no aspira a dominar. Sí, ya lo es y sin Neymar y Messi luchándole el liderazgo, pero el equipo no responde y la gran diferencia esta vez es que Mbappé es la única persona que puede decidir su futuro a partir de junio de 2024, donde, sin resultados, ni el dinero le hará quedarse en el club de la ciudad en la que nació.