Al Khelaifi vuelve a la carga en el Barça: Neymar Júnior en el ajo

Luis Enrique con España y Ronald Koeman (o Quique Setién y Ernesto Valverde) con el Barça nos han permitido descubrir que lo de Ansu Fati, a este ritmo, va camino de convertirse en goleador de leyenda. El delantero del Barça es todavía un proyecto de jugador enorme pero ya ha alcanzado el estatus de gran futbolista, lo cual a sus 17 años es mucho decir. Su precocidad tiene asombrados a todos los ojeadores del continente, entre ellos los de un Paris Saint-Germain que no solo hace planes de futuro con vistas a la inminente salida de Kylian Mbappé, sino a la previsible de Neymar Júnior: ambos culminan contrato en 2022. Con ellos puede jugar Nasser Al Khelaifi y con ellos piensa pescar en el Barça.

Y el objetivo del PSG es la joven perla del ataque blaugrana; una pieza tan preciada y tan cercana a la explosión que los parisinos ya casi huelen. Tanto el jeque como el mismo Leonardo, director deportivo de la entidad de la capital de Francia, se han convencido de que Fati puede ser el próximo crack mundial en pocas temporadas. Si con 17 años ya marca y decide partidos (a los dos goles que anotó ante el Villarreal en Liga hay que sumar que provocó un penalti), ¿qué no podrá hacer con dos años más?

Desde el club campeón de la Ligue 1 saben que es ahora y no dentro de una o dos temporadas cuando la joven perla blaugrana puede estar a tiro. En este sentido, para este mercado de fichajes ya llegan tarde, pero no así para el siguiente, donde pueden ofrecer a la joya de su corona como moneda de cambio por el futbolista. Los parisinos, sin cifras aún concretas por medio, facilitarían la salida de Neymar rumbo al Barça si Fati entra en la operación.

Sobre ello y al igual que le ocurre al PSG con Mbappé, la oferta de salida del 10 de la canarinha es crucial, ya que el futbolista termina contrato en 2022 y puede irse gratis a donde le plazca. En cambio, de esta forma, ellos reciben una suculenta suma de dinero por Neymar, aún por fijar, le garantizan al Barça obtener el regreso del brasileño y además se hacen con Fati, que será un crack mundial y al que no tendrán que pagar una ficha ni remotamente parecida a la de Neymar o el 10 de Les Bleus. Jugada redonda y tentación para el Barcelona.