Keylor Navas da calabazas a CR7 por Messi y Beckham: el PSG se rinde a su jugada maestra, un bombazo
El mítico exportero del Real Madrid gana enteros para ser compañeros, de nuevo, del 10 de Argentina
Tiene ofertas diversas pese a sus 37 años, sin embargo, todo hace indicar que Keylor Navas va a esperar una muy concreta, que es, a la vez, jugosa deportiva, económica y anímicamente. Y esa no es otra que la llamada, que Tata Martino ya prepara, de Inter Miami y más concretamente de David Beckham, otro ex jugador del Real Madrid, para dejar el Paris Sant-Germain ahora en junio y marcharse a la MLS.
No a Arabia Saudí si puede elegir, y puede
Decíamos que Keylor Navas ha dado calabazas a su excompañero en el Santiago Bernabéu, con el que ganó tres Champions League de forma consecutiva, Cristiano Ronaldo porque el costarricense -hasta el próximo mes, todavía jugador del equipo francés- prefiere jugar en Estados Unidos, donde tendrá diferentes ventajas que, más allá de lo económico, le permiten otra vez elegir su destino.
Porque sí, Navas iba a cobrar más dinero seguramente en la Saudi Pro League, pero el proyecto en Miami le atrae deportivamente en mucha mayor medida, ya que volverá a jugar con Leo Messi, con el que hizo buenas migas en el Parque de los Príncipes, y con otros futbolistas legendarios como Luis Suárez, Sergio Busquets o Jordi Alba, pero además jugará en su continente, América, teniendo su país natal, Costa Rica, a un paso, y en una liga atractiva, como es la Major League Soccer.
Agente libre y ventana asegurada
Y todavía hay más puntos que favorecen este posible acuerdo, entre otros el de un Tata Martino que le habría pedido ese esfuerzo a su directiva, según apuntan ciertos informes sobre la actualidad del meta, que será agente libre en unos días. Martino, preguntado al respecto, ha querido echar balones fuera, aunque asegura que “hay varios nombres” con los que juegan de cara a la próxima ventana. Y entre ellos, advierte Goal, está el del portero tiko, que sería la respuesta bajo palos en las garzas a un Drake Callender que no convence.