Zinedine Zidane se atreve a señalar a la verdadera ‘manzana podrida’
Da un nombre propio en el Real Madrid
Zinedine Zidane muchas veces ha tenido que sacar pecho, y asumir errores. Porque nadie es perfecto, y él también los ha cometido, como, por ejemplo, en el fichaje de Eden Hazard. Creía que era la persona adecuada para convertirse en la nueva estrella del Real Madrid, pero el tiempo no le ha dado la razón en absoluto. En el año y medio que lleva, lo único que le ha dado han sido disgustos, tanto por su bajo nivel, como por sus constantes lesiones.
No obstante, cree que muchas veces le ha tocado cargar con las culpas de cosas en las que no tenía nada que ver. Un ejemplo de ello han sido los irregulares resultados, o la planificación de la plantilla. Ciertamente, es complicado ganar partidos cuando falta la mitad del equipo, y tiene que apostar por los suplentes o, incluso, por los jóvenes talentos de la cantera. Y en eso, él ha tenido poco o nada que ver, ya que pidió muchos refuerzos, y no llegó ninguno.
Y aquí es donde aparece la figura del que, para el técnico galo, es el verdadero responsable del declive del club, que ha pasado de ser el favorito en todos los títulos, a estar un escalón por debajo de otros como Bayern de Múnich, Manchester City o Liverpool. No es otro que Florentino Pérez, que desestimó la contratación en su momento de Kylian Mbappé, e hizo fichajes poco comprensibles, caso de Eder Militao, Álvaro Odriozola, Danilo, Vinicius Junior…
‘Zizou’ no entiende porque nadie señala al palco, pues una buena parte de la culpa de todo la tiene el presidente. Por si no fuera suficiente, también desestimó la contratación de un galáctico cuando se marchó Cristiano Ronaldo a la Juventus de Turín, a pesar de las advertencias. Y es el responsable de que las negociaciones para renovar a Sergio Ramos y Lucas Vázquez, que son titulares indiscutibles, estén completamente paralizadas, a pesar de quedar libres en junio.
Lo sencillo es echar la culpa a los jugadores del Madrid, o al entrenador. Pero nadie se pregunta si la entidad está en buenas manos.
Quizás, necesitan a un nuevo líder, tras más de una década.