Zinedine Zidane puede acudir al rescate de este joven crack

No vive un buen momento en su equipo

Tanguy Nianzou Kouassi está viviendo una auténtica pesadilla en su etapa en el Bayern de Múnich, pues ni en sus peores sueños se le podía pasar por la cabeza la situación que atraviesa. El pasado verano decidió abandonar el Paris Saint-Germain, club en el que se crió, pese a que tenía una oferta de renovación sobre la mesa, y venía disfrutando de cierta continuidad en el primer equipo, para marcharse a otro club donde viera más capacidad para crecer.

Y tuvo varias ofertas, pues no faltaron interesados en acoger a un crack con un tremendo potencial, y unas cualidades físicas y técnicas brutales. Además, a eso hay que sumarle su edad, ya que todavía está en edad juvenil, pues es de la generación del 2002. Pero se decantó por la Bundesliga, un destino recurrente para los jóvenes talentos salidos de Francia. Viendo como le fue a Ousmane Dembélé, Moussa Diaby, Dan-Axel Zagadou o Abdou Diallo, quiso jugársela.

El problema es que no aterrizó en cualquier club, si no que lo hizo, nada más y nada menos, que en el vigente campeón de la Champions League. No le podían prometer minutos ni continuidad, pero no entraba en las quinielas de nadie que fuera a jugar tan poco. Porque no entra en los planes de Hans-Dieter Flick, que no le puso como titular ni este fin de semana, ante el Borussia Mönchengladbach, a pesar de que ya habían ganado el título, después de la derrota del RB Leipzig contra el Borussia Dortmund.

Al menos, Kouassi entró desde el banquillo, cuando el marcador ya reflejaba un contundente cinco a cero, en el minuto 70. Pero no duró casi nada, pues solo un poco más tarde, vio la roja directa. Anímicamente está hundido, y por eso piensa en abandonar el Allianz Arena, a pesar de la llegada de Julian Nagelsmann en junio. Y su salvador puede ser el Real Madrid, al que fue vinculado en su momento, antes de decantarse por el Bayern.

Zinedine Zidane es un gran admirador del joven defensa galo, y puede llevárselo a La Liga Santander.

Tendría las puertas de salida abiertas de par en par.