Zidane espera y sabe que uno va a caer: la estrategia del Real Madrid

Debe llegar un mediocentro

A estas alturas si el Real Madrid y Zinedine Zidane tuviesen que escoger una pieza con la que engordar la plantilla esa sería N’Golo Kanté. Carlos Henrique Casemiro es de los jugadores más destacados de Europa, si no el mejor, en la recuperación de balón y el mantenimiento y cohesión entre las líneas, pero su desgaste es intenso y con el balón en los pies no es un virtuoso. Y necesita un recambio, un apoyo. Y dado que el jugador del Chelsea está muy complicado, Zizou destapa dos viejas pretensiones y ambas están conectadas: una de las dos caerá.

Paul Pogba sigue siendo de los favoritos entre los mediocampistas posibles, pero el Manchester United no mueve ficha y se mantiene en sus pretensiones, absolutamente prohibitivas para Madrid y Juventus. El posible fichaje de Ndidi por parte de los red devils facilitaría la posibilidad blanca de acercarse a Pogboom. Mientras, Mino Raiola, su agente, está como loco por llamar la atención de los grandes, y lo que el míster galo del Madrid no quiere bajo ningún concepto es que se vista de blaugrana.

La otra opción es Donny van de Beek, que costaría 40 millones de euros. Tras la pista del holandés también está el United. Ambos clubes parecen conectados en intereses cruzados que afectan a uno y a otro. Como estos dos jugadores. Zidane sabe que si los diablos rojos evitan al mediocentro del Leicester por la cantidad pedida y van a por el neerlandés entonces los ingleses dejarán libre al jugador de Les Bleus.

De forma contraria, en la casa blanca confían en que el futbolista de los Países Bajos del Ajax de Ámsterdam, si ve que la ventana de fichajes avanza sin novedad, presione para vestirse de blanco, que, al perecer, es lo que desea, como ha dicho el legendario jugador de la Naranja Mecánica Ronald de Boer para Fox Sports NL. Lo que está claro es que ya sea en Old Trafford o el Santiago Bernabéu, Pogba y Van de Beek no jugarán juntos; es más, uno forzará el fichaje del otro.