Zidane echa a un traidor (y la Premier League lo acoge)
El Real Madrid cierra una salida
Zinedine Zidane ha hecho pocos, pero varios enemigos en el Real Madrid. Sin duda, el caso más sonado es James Rodríguez, con el que nunca ha contado, y al que ha echado del club hasta en dos ocasiones. La primera, cuando se fue al Bayern de Múnich, y la segunda, esta, en la que está a punto de irse al Everton de Carlo Ancelotti. Y lo mismo sucede con Gareth Bale, al que le puso la cruz hace tiempo, si bien en su caso no ha podido lograr echarle.
Aunque, si hay un futbolista con el que ha tenido varios roces, tanto en privado como en público, ha sido con Dani Ceballos. Porque, en su primera temporada en el Santiago Bernabéu, la última del galo antes de su regreso, coincidieron. Y el internacional español apenas estuvo sobre el césped unos 500 minutos, unas cifras paupérrimas. Y más, teniendo en cuenta que había aprobado su llegada, y que venía de realizar un gran Europeo sub 21, siendo el MVP.
Al acabar el curso, en el que se coronaron como campeones de la Champions League, el entrenador francés comunicó su dimisión, algo que propició que el andaluz siguiera en el club. Porque Julen Lopetegui le prometió un papel importante, siendo un revulsivo habitual, y una valiosa pieza en las rotaciones. Y así fue, aunque no supo aprovechar las oportunidades y no pudo convencer. Eso si, en su defensa hay que decir que muchos partidos los jugó fuera de posición.
En ese tiempo, el ex del Real Betis Balompié aprovechó para disparar con bala y lanzar varios dardos a ‘Zizou’, que no los recibió nada bien. Pero la venganza se sirve en un plato frío, y, cuando volvió, de manera sorprendente, al Madrid, no dudó en volver a enseñar la puerta de salida al sevillano. Y su destino se encontró en el Arsenal, que se hizo con sus servicios por un año. Allí, ha tenido altibajos, pero no ha dejado mal sabor de boca.
Por ello, volverá para ponerse a las órdenes de Mikel Arteta. Y es que sigue sin tener sitio en los planes de Zidane. De hecho, nunca los tendrá.
Para él, es un traidor.