Zidane: “Allá ellos, sabían lo que había”. La foto no deja dudas

En la semana más feliz para el madridismo en lo que va de año (en enero se consiguió la Supercopa de España en Yeda, Arabia, pero ni parecido a la satisfacción que da el ganar una Liga) ha habido también alguna intrahistoria que ha dejado ver que no todo el vestuario es una piña, ni mucho menos. Se sabía que tanto James Rodríguez como Gareth Bale no estaban al 100% con el club (basta con echar un vistazo a su actitud a lo largo de la temporada) pero no estaba tan claro que incluso en plena celebración los dos se mostrasen tan fríos y distantes con Zidane y con el resto de sus compañeros.

Tras la victoria el pasado jueves en el estadio de Di Stéfano, el Madrid recibió el título de Liga de manos de Antonio Gómez-Reino, encargado de las Relaciones Internacionales de la Real Federación Española de Fútbol. Tras este acto, el vestuario se unió en una piña para mantear al entrenador y máximo artífice de este título, Zinedine Zidane. Todos los miembros del primer equipo participaron en este homenaje a su míster excepto dos: Gareth Bale y James Rodríguez.

Cuando Zidane ha sido preguntado por esta actitud de las dos estrellas (no olvidemos que son dos de los mejores pagados en la primera plantilla) el técnico ha querido quitarle hierro al asunto afirmado que tanto Bale como James sabían perfectamente que tendrían muy difícil jugar, que él no engañó a nadie ni dio falsas esperanzas a ningún jugador. Lo cierto es que tanto Bale como James tienen aún contrato en vigor (dos años le restan al galés y uno al cucuteño) y será una misión casi imposible sacar a los dos jugadores de allí debido a la elevadísima nómina que tienen y a que el Madrid no quiere regalarlos ni malvenderlos.

Lo que está claro es que si por Zidane fuese este habría sido su último desplante, porque para el francés los dos jugadores están muertos futbolísticamente.