Xavi Hernández lo deja claro: ya no hay estrellitas en el equipo
Ha sido en su cuarto día cuando ha demostrado que iba en serio
El nuevo y flamante técnico del Fútbol Club Barcelona ya manda en la Ciudad Condal, o al menos en lo que al primer equipo respecta. Tan solo cuatro días han bastado para demostrar que Xavi Hernández va muy en serio con su reglamento interno y que es inquebrantable para todos y cada uno de los jugadores de la plantilla. Sin excepciones.
Si el de Tarrasa era presentado el pasado lunes, el martes por la mañana ya estaba entrenando por primera vez a su equipo con la mente puesta en el derbi catalán que se disputará el próximo día 20 de noviembre. Aunque las bajas eran numerosísimas (21 entre internacionales y lesionados) si que había algún peso pesado del vestuario entre los disponibles esta semana como por ejemplo el capitán Gerard Piqué o el francés Ousmane Dembele.
Ya el martes se supo que Piqué anulaba sus viajes a Madrid la semana de la celebración de la Copa Davis (del 25 de noviembre al 5 de diciembre) para centrarse en su equipo en respuesta a la petición expresa de su nuevo técnico. Atrás quedaron esas tardes en la Caja Mágica en plena temporada hace ya dos años, en noviembre de 2019, con Ernesto Valverde en el banquillo.
Pero Dembele ha puesto también a prueba a Xavi Hernández en la primera semana llegando tarde ya el cuarto día a las instalaciones del club. Han sido tan solo tres minutos, pero suficientes para que su equipo le imponga la primera multa de la era Xavi. Si algunos pensaron que el ex jugador blaugrana iba de farol con sus nuevas normas, o que habría favoritos y diferentes varas de medir en función de que jugador fuese el afectado, Xavi ha demostrado en sus primeros días que no será así.
Dembele ha sido uno de los jugadores más alabados por parte de Xavi Hernández, del que ha dicho que espera que se convierta en el mejor jugador del mundo en poco tiempo. Pero por mucho candidato que sea a ello, deberá llegar en tiempo y forma todos y cada uno de los días de la temporada.
Xavi ha mandado un mensaje alto y claro en su primera semana: no hay favoritos en este Barça. Si el equipo empieza a sumar victorias, habrá ganado el pulso a la plantilla, pero si no, está por ver por cuanto tiempo se mantiene todo esto en pie. Koeman o Setién ya lo intentaron antes con el ya conocido resultado.