Xavi besa los pies de Laporta y Alemany: robo inesperado del Barça a un Chelsea muerto de envidia

Fue el primero en llegar y por fin se gana su puesto en 'can Barça': sonó para Stamford Bridge, pero prefirió vestirse de culé

Si no fue el mejor del FC Barcelona en el Santiago Bernabéu en la ida de semifinales de la Copa del Rey, se le pareció bastante, por eso el Barça ha certificado que el jugador, que fue de los más señalados de cara al próximo mercado de fichajes veraniego, no solo no saldrá en junio sino que conseguirá un mayor protagonismo en la plantilla, especialmente si el Barça, como ha dicho Javier Tebas, no puede fichar (veremos si hay permutas entre los que salen y entran). De ahí que Xavi alabe a Laporta y Alemany por este movimiento.

Franck Kessié, el multiusos que fichó el Barcelona adelantándose al Chelsea, que lo quería, y al mismo AC Milan, que deseaba conservarlo, por fin está disfrutando de minutos y eso le está haciendo ser importante en el equipo. El costamarfileño, fuerte y potente, capaz de hacer transiciones rápidas, de ejercer de box to box, aportar músculo y también presencia al centro del campo culé, dotándolo de una robustez más acusada, de pronto ha surgido como una fortaleza del pasado mercado de fichajes.

Ante el Madrid

Prueba de ello, como decimos, fue el Clásico, cuyo gol del Barcelona es en cierta forma obra suya -pese a que el balón rebota en Eder Militao y Nacho Fernández no acierta de despejarlo-. Pero lo importante del africano es y fue en el partido frente al Real Madrid su capacidad tanto para sumar efectivos en el despliegue en velocidad en transición, al contragolpe, como volviendo en el repliegue, cerrando puertas a los blancos. Y eso lo ha repetido cuando ha disfrutado de minutos.

Unido a ello, hay pocos jugadores en la medular blaugrana, por no decir ninguno, que tengan su capacidad para aparecer en casi cualquier franja del campo y sumar en todas ellas. Pudiendo hacer incluso de pivote, posición que llegó a ocupar en el AC Milan la temporada pasada, Kessié es el jugador rentable -salió a coste 0-, silencioso -pese a su falta de minutos, no ha dado un ruido- y eficaz -siempre que ha jugado, ha cumplido-. Es, en suma, un acierto de Laporta y Alemany que robaron al Chelsea y que agradece Xavi.