Tras la celebración llega el problemón para Alemany: Dembélé, sí a Xavi pero hunde a Laporta

La renovación del francés, en el punto de mira: su salida podría acelerarse

El Barcelona ha sido más que justo vencedor de esta última edición de LaLiga, la cual, a falta de cuatro jornadas, está decidida en su favor, lo que habla de su regularidad, ahora bien, una vez se ha cerrado el segundo y más importante de los títulos obtenidos esta campaña por los culés, el barcelonismo mira con preocupación a un mercado de fichajes donde los frentes se le acumulan a la entidad y donde, para más inri, se cuela un viejo invitado: Ousmane Dembélé.

A vueltas con su salario y la duración de su contrato

Si se acuerdan, el Barça y Dembélé llegaron a un acuerdo para que el internacional francés renovara con la entidad dejando de lado unas durísimas negociaciones entre Mateu Alemany y el agente del jugador, Moussa Sissoko, sin embargo, al Barça le interesaba cerrar esa ventana en medio de las palancas de Joan Laporta aun sabedor de que las formas y las condiciones volverían pronto para importunarlos, que es justo lo que puede pasar en estos próximos meses.

Varios frentes y un común denominador: el ingreso de dinero

En un contexto financiero y estructural convulso, de un lado está el problema de conseguir regular, mediante la inyección de ingresos, el déficit de la masa salarial que atormenta al Barça y pone incluso en peligro el futuro de Alejandro Balde y Gavi, que ahora sí son una prioridad en el club. Pero por otro y más allá de que se vendan activos de la entidad para lograr más financiación, es indudable que el Barça necesitará vender, aunque sus jugadores transferibles, los Ansu Fati, Ferran Torres, Eric García o, llegado el caso, Raphinha lo están poniendo complicado, de modo que quizá haya que tirar de una venta más dolorosa. Lo sería en el caso de Ousmane Dembélé para Xavi Hernández, ya que considera al francés clave; la sintonía entre ellos dos no es el problema.

Ahora bien, el Barça sabe que el agente del jugador no solo no renunciará a nada de cara a la fecha de finalización de su contrato, en junio de 2024, sino que exigirá un contrato de estrella, uno que puede obtener fuera de la ciudad condal, por ejemplo, dicen, en el Paris Saint-Germain o el Manchester United. Con solo un año de margen, quizá escuchar ofertas por el galo ahora que pueden sacar algo de tajada del traspaso en la ciudad condal, tal vez sea una buena idea. Eso sí, el jugador, en su renovación forzada, impuso al club llevarse un porcentaje muy elevado de un hipotético traspaso, de modo que este debería ser millonario para ser sopesado en can Barça. Como ven, el problema que se viene con Dembélé, ya sea exigiendo desde dentro o buscando un comprador, es importante e ineludible y todavía afecta a Mateu Alemany, que se quedará en el mercado del Barça y parece que no dará el salto a la Premier.