Traiciona la campaña electoral de Joan Laporta: plantón del galáctico

La crisis del Liverpool que parecía encarar su recuperación, después de romper su racha negativa en Premier ante el Sheffield, ha vuelto al enfrentarse a un rival de la parte alta de la tabla. Ganar al colista no ha servido para motivar lo suficiente a los pupilos de Klopp, que cayeron con justicia ante el Chelsea de Tuchel. El duelo alemán en los banquillos se saldó para los de Londres, que adelantan al Liverpool y hacen sonar todas las alarmas. Alerta roja en Anfield, la amenaza de la desbandada que se preveía a final de temporada parece cada vez más real, a medida que se alejan de los puestos de Liga de Campeones. Salah, uno de los grandes señalados para abandonar el barco, tiene pie y medio fuera, pero si bien Laporta estaba ya cantando victoria, su fichaje se ha complicado de una forma inimaginable. 

Como ya comentábamos en informaciones pasadas en Don Balón, el que suena como favorito para ganar las elecciones presidenciales del Fútbol Club Barcelona ha utilizado durante su campaña el arma de Mohamed Salah. Joan Laporta anunció, no solo que conseguiría mantener a Messi, sino que tenía atado al egipcio para dar a los culés un proyecto galáctico para la temporada que viene. 

Pues bien, a un día de las elecciones el futuro del egipcio no está ni mucho menos ligado a las aspiraciones de los azulgranas. Lo que sí es cierto es que la tensión entre míster y jugador en la Premier va en aumento y, de volverse realidad la pesadilla de no clasificar para la próxima edición de la Champions, es más que probable que se produzca el adiós. El jugador de 28 años se encuentra en un buen momento de su carrera y no quiere perder ni un año sin deslumbrar en Europa. Su propio agente ya ha dado muestras en las redes sociales de su descontento y parece que su despedida será una realidad. 

Más allá de centrarse en el Barça, el africano tiene varios equipos interesados, como no podía ser de otro modo, entre ellos el Real Madrid, quien ya le ha estado siguiendo la pista de cerca, y el Bayern de Múnich, que le llena de elogios comparándole con Messi. El plan de Mo Salah no es ir al Barcelona, sino ser el centro de una subasta millonaria el próximo verano. Por si Mbappé o Haaland no fueran suficientes, otro nombre copará las portadas de todos los medios. Laporta tendrá que buscar otra estrella, se complica su promesa electoral.