Tenso decreto de Bartomeu a Koeman por Ousmane Dembélé: va a escocer
El Barça debe decidir y las fechas se echan encima, Ansu Fati implicado
Tras dos intentonas fallidas y con las urgencias siempre salpicando la actualidad del FC Barcelona tras un año sin conseguir ningún título, Josep Maria Bartomeu y Ronald Koeman no pueden esperar por ningún jugador porque necesitan resultados… salvo por Ousmane Dembélé, por el que existe una fuerte controversia. Y es que esas intentonas de venderle a la Premier han sido infructuosas porque el jugador ha deseado en todo momento quedarse en el Barça y triunfar en el Camp Nou y LaLiga. Pero Koeman no lo ve claro, mientras que Bartomeu le hace que lo visualice.
No es que el presidente se vaya a meter a hacer las alineaciones del Barça pero sí le pide a Tintín que tenga más en cuenta a uno de los fichajes más caros de la historia de la entidad culé, como es El Mosquito. Es más, le exige que le recupere para la causa. Dembélé, pese a todo, sigue siendo un jugador con una calidad excepcional y que tiene mercado, por lo que el Barça, metido en plena crisis económica, no se puede permitir no usar al francés y dejar que se devalúe.
Y ya sea por la insistencia del máximo responsable del club o porque el jugador se lo va ganando, pero Koeman ya intenta introducirle en la dinámica del equipo con vistas a que en algún momento pueda tomar la titularidad. Y en este punto puede haber controversia entre lo que pide Bartomeu y lo que exige la grada y la masa social, ya que con Leo Messi y Antoine Griezmann fijos en el once, la entrada de Dembélé supone la salida de Ansu Fati, que ha sido de lo mejor del equipo en el arranque liguero.
Otra posibilidad es dejar en el banquillo al ex del Atlético de Madrid, pero Bartomeu se niega a sacrificar antes de tiempo a su gran apuesta de la temporada pasada: valió 120 millones de euros, con él llegó el lío por Neymar Júnior y ahora que no está bien (si es que ha estado bien en Can Barça en algún momento) sentarle sería poco menos que lapidarle. Así que la perspectiva que tiene Tintín por delante es compleja, ya que los dos franceses deben jugar, Ansu Fati también y Philippe Coutinho y Leo Messi son poco menos que insustituibles. Vuelve Dembélé y su llegada lo cambia todo.