El sustituto de Quique Setién es un tapado de la Serie A ¡Vaya temporadón!
El Barça sondea su evolución como entrenador
A diferencia de su hermano, que alcanzó por momentos la vitola de crack (mucho más tras ser el artillero referencial especialmente del AC Milan), la huella de Simone Inzaghi como futbolista fue menos profunda en la historia del fútbol italiano que la del 9 rossoneri; con todo, fue un jugador con calidad y peso, especialmente en la Lazio, lo que le valió ir con la Nazionale hasta en tres ocasiones. Otra cosa es como entrenador, también en el club capitalino, el de sus amores, donde ya es por sus méritos el segundo equipo de Italia, el que más de cerca hostiga a la Juventus de Cristiano Ronaldo, lo que no pasa desapercibido para los grandes clubes de Europa, entre ellos el Barça.
Lo tantean. Aún no se han planteado contactar con él, pero gustan sus métodos y sus formas, que además tienen resultados. No en vano los biancocelesti son segundos por delante del Inter de Milan de Antonio Conte y a un punto de los bianconeri, situándose ya por derecho propio como el máximo aspirante al título que quiere volver a llevarse el conjunto turinés. Y lo es gracias a su victoria de ayer frente a los nerazzurri por dos tantos a uno.
El choque de Roma es un aviso a navegantes, tanto de lo que puede hacer la Lazio como de lo que es capaz de construir con un equipo el pequeño de los Inzaghi. Las dos grandes superestructuras que forman los milanistas y los juventinos se ha visto sorprendida por un proyecto atractivo, tanto en juego como en nombres, que goza de buena salud en lo futbolístico, está exento de presión y que tiene argumentos para –en la jornada vigesimocuarta- posicionares como un aspirante real al scudetto.
En el caso del FC Barcelona hay un componente además que le llama la atención en la ficha de Inzaghi, más allá de que le parece atractiva tanto su filosofía como su talante, y es que el míster italiano finaliza contrato en el verano de 2021. Unido a ello, en las temporadas que lleva al frente de las Águilas ha conseguido títulos -por ejemplo es el actual campeón de la Copa- y lucha por la liga sin estar entre los cinco mayores presupuestos del país transalpino, lo cual es de enorme mérito: Juve, Inter, Milan, Nápoles o Roma están por delante. Buen entrenador, excelentes métodos y grandes resultados. El Barça, al acecho.