Sorpresa en Valdebebas con Ancelotti y un top-10 de la historia del fútbol: 300M y un asunto atroz

En el Real Madrid incluso se han alzado voces por un traspaso prematura; verano, la fecha decisiva

Certificar el final de uno de los mejores jugadores de todos los tiempos, y más aque probablemente un top-10 en su puesto, no es un asunto sencillo ni mucho menos agradable para el club que lo tiene en nómina, en este caso el Real Madrid. Pero efectivamente Luka Modric está en el epicentro de las miradas, sobre todo por su suplencia en Gran Canaria, ultimo partido de los blancos en LaLiga EA Sports. 

Una venta que Carletto no desea

En el club hay voces que incluso llegaron a plantear (y aún hoy lo hacen) la posibilidad de un traspaso prematuro que deje dinero en las arcas antes de que el mediocampista acabe contrato en junio, rumbo a Arabia Saudí, pero esa vía Carlo Ancelotti la deshecha, no así la de su salida en verano, donde el Real Madrid va a moverse en el mercado en busca de caras nuevas y la edad del croata, la competencia y la exigencia de la temporada impiden al italiano darle garantía de minutos, mucho menos de la titularidad.

¿Extensión?

Modric, honesto con el club y consigo mismo, ya advirtió en el pasado que se irá cuando no se vea capacitado para aportar, y esta temporada su paso atrás es incesante. Es verdad que está lo mejor y más importante por venir en la competición y ahí la calidad y experiencia del capitán de Croacia puede ser clave, de ahí que Carletto lo reserve, pero pensar en una extensión de contrato hasta 2025 parece complicado.

Más cuando, recordemos, Arabia Saudí sigue tentando al jugador, al que ni más ni menos que ofrecieron 300 millones de euros por tres temporadas, una cifra que según nos dicen sigue en pie. Con eso, la falta de minutos, varios retoques en la plantilla y la poderosa competencia, Modric puede caer definitivamente. Eso sí, el míster descarta el traspaso en este final de enero y principio de febrero: aunque hay voces que lo vieron como un negocio lucrativo, Carletto cree que tarde o temprano tendrá que tirar de la magia del mejor jugador croata de todos los tiempos. Otra cosa es poner la mano en el fuego por él en la 24/25, ahí el preparador transalpino no está dispuesto a quemarse. Por la herencia y la huella, despedirse de una figura así no será sencillo para nadie en Valdebebas.