Simeone señala a su peor fichaje (y quiere echarlo del Atlético)

Fue un error traerle a la capital de España

A lo largo de su estancia en el Atlético de Madrid, Diego Pablo Simeone ha cerrado varios fichajes que han resultado ser un fracaso. La lista es bastante larga, por no decir interminable, y se incluyen nombres propios que aún dan pesadillas a la afición cuando recuerdan su paso por el club. Jackson Martínez, Nicolás Gaitán o Alessio Cerci son algunos claros ejemplos de ello, pues costaron un dinero importante, y su aportación fue escasa, por no decir nula.

Aunque, para muchos, la peor operación que han cerrado en esta última década, desde que el técnico argentino asumió el control, es otra. Y ese dudoso honor recae en los hombros de Víctor Machín, más popularmente conocido como ‘Vitolo’, que generó una gran expectación. Porque llegó destinado a triunfar, ya que sus cualidades parecían encajar como un guante en el esquema del ‘Cholo’, que lo pidió expresamente. Su deseo fue concedido hace ya casi un lustro.

En verano de 2017, pagaron 35 millones de euros para quitárselo al Sevilla, donde venía siendo una de las estrellas. Allí ganó tres Europa Leagues, y se convirtió en un fijo en la selección española absoluta. El problema es que no pudo ser inscrito, por culpa de la sanción de la FIFA, y tuvo que pasar el primer tramo de esa campaña a préstamo en la UD Las Palmas, también en La Liga Santander, club en el que se crió. Pero nunca tuvo el impacto esperado.

Al igual que Diego Costa, que regresó en el mismo periodo de traspasos, nunca ha sido capaz de asentarse en el Wanda Metropolitano. Su importancia ha ido cada vez siendo menor, hasta llegar esta temporada, en la que ha tocado fondo, pues ya tiene 31 años. Y tan solo acumula 396 minutos divididos en 12 encuentros, sumando todas las competiciones. Su bagaje es de una sola asistencia, y no ha sido capaz de ver puerta todavía. Ya casi ni entra en las convocatorias.

Vitolo está en la lista de transferibles, y esperan recibir una oferta decente para poder traspasarle. Eso si, parece complicado que alguien vaya a pujar por él, visto lo visto.

Veremos.