Ronald Koeman se juega un órdago para seguir en el FC Barcelona

Ahora Laporta tiene unos días para decidir si le compra este discurso

Ronald Koeman sabe que sus horas en Barcelona podrían estar contadas. El aún entrenador del Fútbol Club Barcelona puso punto final ayer a la temporada en Éibar y ahora hace falta saber si esto habrá sido el adiós definitivo a su andadura en el club con el que hizo historia allá por 1992 con aquel mítico gol en Wembley o si Joan Laporta y su junta deciden darle una vida extra con la que comenzar su segunda temporada.

Lo que ha hecho Koeman en su última rueda de prensa de la temporada es confirmar que él tiene ganas y fuerza para comenzar ese segundo año (lo tiene firmado y, de no continuar, el club le tendrá que abonar una indemnización de 7 millones de euros) justificando el mal final de temporada al cargar contra la falta de calidad de la plantilla a la vez que elogiaba el trabajo realizado por él y por su equipo técnico a lo largo de toda la temporada.

Y es que Koeman, como ya comentábamos recientemente en Don Balón, no es de los entrenadores que se guarde lo que piensa para si mismo y si tiene que lanzar unas duras palabras contra su plantilla, él las suelta. En este caso está claro que su discurso necesita culpabilizar a los jugadores porque, de lo contrario, se estaría autoseñalando y nada más lejos de la realidad.

Ahora está por ver si Joan Laporta opta por creer en este relato que le ofrece Koeman y tiene paciencia con el mister como la tuvo en 2003 con Frank Rijkaard o si decide dar un cambio de rumbo total y apostar por alguien que sea de su total confianza como sería con Xavi Hernández. Esta semana será clave para conocer la deriva que toma este asunto y puede que haya incluso desenlace muy pronto, ya que Laporta no quiere dilatar en el tiempo algo tan importante como saber quien liderará su primera temporada completa al frente del Fútbol Club Barcelona.

Koeman ya se ha postulado para el cargo más allá del próximo 30 de junio. Ahora será Laporta quien tome la decisión final.