Riqui Puig se queda: la salida que habrá en lugar de la suya

Riqui Puig finalmente se ha negado a irse, y ha dejado claro que no tiene pensado moverse del Barça. Le da igual que no vaya a tener muchos minutos ni la continuidad necesaria, pues está convencido de que, tarde o temprano, le llegará la oportunidad. Y no la dejará pasar, dejando claro a Ronald Koeman que se ha equivocado en su decisión de querer echarle. Un deseo, el de quedarse, que Josep María Bartomeu ha aceptado, y ve con buenos ojos.

Pero eso implica que habrá otro futbolista que tendrá que hacer las maletas, y probar suerte en otro sitio. Y el elegido es Pedri González, que ha dejado muy buenas sensaciones en la pretemporada, y ha demostrado que está preparado para jugar en la élite. Ya llegaba con un gran cartel, después de su buen hacer en las filas de la UD Las Palmas, club del que es canterano, y desde el que le reclutaron, previo pago de unos cinco millones de euros.

Y, junto a Francisco Trincao, ha sido una de las sorpresas agradables, sin duda. Todos esperaban que se quedara, a pesar de las numerosas ofertas que ha recibido a lo largo de estas últimas semanas. Pero la decisión de quedarse con el de Matadepera influye, y mucho, en su futuro, pues las fichas que hay son escasas. Y el canario ya dejó claro que, si bien su prioridad es seguir en el Camp Nou, lo que quiere por encima de todo es jugar cada semana.

Por eso, no descarta para nada y no ve con malos ojos un préstamo a un sitio en el que pueda sentirse importante. Bayern de Múnich, Borussia Mönchengladbach, RB Leipzig, Ajax de Ámsterdam, Real Betis Balompié, Real Sociedad o Celta de Vigo son solo algunos de sus pretendientes. Y a ellos, ahora se suma el PSV Eindhoven, que ha sido el último invitado en colarse en la puja. En los próximos días, el Barça tendrá que tomar una decisión final.

Porque Pedri espera que le confirmen ya si se tiene que ir a otro lado. En ese caso, parece que la Bundesliga sería su destino favorito, pues es una competición donde los jóvenes suelen formarse bien.

Todavía pueden pasar muchas cosas.