Raphael Varane alucina: el negocio blanco con Bayern y PSG es su socio
Ahora las circunstancias cambian con motivo de Ramos y Alaba
El Real Madrid necesita un lavado de imagen, eso es evidente. Hay demasiadas piezas intrascendentes en la plantilla para el juego del equipo y la pizarra de Zinedine Zidane. Raphael Varane no es una de ellas, de hecho, es uno de los activos más valiosos de la plantilla, tanto en rendimiento como en su valor de mercado, y el hecho de que no haya renovado, unido al interés de varios equipos en su persona, lo coloca en el ojo del huracán, más si nos atenemos a los dos grandes culebrones, junto a Mbappé, de la casa blanca: Alaba y Ramos.
Por eso el nombre de Varane está emparejado con una salida de la entidad de Concha Espina un día sí y otro también, y si no renueva, sabe el central de Les Bleus, todavía más. Ahora bien, la irrupción de David Alaba o la posible renovación a regañadientes del sevillano puede que no le señale a él, sino a otro miembro de la plantilla que pasa más desapercibido, pero sigue sin encajar del todo para Zizou.
Y ese no es otro que Eder Militao, el cual aparece y desaparecer (mucho más de esto último) de los onces de Zizou con excesiva frecuencia, al menos una cadencia mucho mayor de lo que indica su teórico estatus por los 50 millones de euros que costó procedente del Oporto. Dicho lo cual, si Ramos se queda (parece que es lo que sucederá) y David Alaba por fin confirma su llegada a la capital de España, Eder Militao es una pieza a tener en cuenta como posible salida, máxime teniendo cuando tanto el PSG como Liverpool preguntan por él.
Sobre este asunto, hay varios jugadores, incluido el propio Varane, que miran la renovación de Ramos y la llegada de Alaba con lupa; no obstante, en una línea de cinco sí tienen cabida varios de ellos, pero no en el 4-4-2 o en el 4-3-3, siendo la entrada del austríaco una amenaza incluso para el propio Varane. Así las cosas, el elemento más débil por minutos y confianza de juego del míster es el brasileño, que con Alaba podría tener las horas contadas.