Primero Koundé y ahora él: Xavi prepara el fichaje que deja KO a Piqué

El central llegará para sustituir al capitán azulgrana y formar la nueva defensa

Una vez que se ha reforzado, y con muchos millones de euros además, en la zona delantera, ahora la principal obsesión de Xavi Hernández es hacer de su Barça un equipo duro y rocoso en la zona defensiva. El entrenador catalán no quiere que en esta nueva temporada se vean las fisuras y la endeblez que se pudieron atisbar durante el pasado curso y que tantos disgustos le dio, por lo que después de Koundé los azulgrana no se van a quedar ahí y ya han fijado un nuevo objetivo sobre el que lanzarse de manera descarada.

Se trata de Íñigo Martínez. En Don Balón ya habíamos contado hace unos días que el central del Athletic Club estaba en el punto de mira del equipo que preside Joan Laporta pero ahora parece que el interés es mucho más grande y que la ofensiva es inminente. Eso es lo que afirma el periodista de Onda Vasca José Manuel Monje, que publica que el Barcelona está preparando para las próximas horas una oferta en firme y muy importante por el central rojiblanco. De esta manera, Xavi Hernández quiere formar una nueva defensa formada en su eje por Jules Koundé y por el internacional español Íñigo Martínez.

Todavía no han trascendido cifras acerca de la operación pero lo que sí es seguro es que de nuevo el Barcelona va a tener que rascarse el bolsillo y va a tener que afrontar otra inversión millonaria. Los culés ya se han gastado varias decenas de millones en este mercado de verano pese a su complicada situación económica y esto supondría un nuevo gasto ya que el defensa todavía tiene un año de contrato y está valorado en unos 25 millones de euros. El Athletic Club no es un equipo además que deje salir fácil a los suyos y seguro que pedirá una cantidad elevada al Barça, por lo que Laporta tendrá que hacer un esfuerzo.

Este fichaje, en caso de producirse, deja en muy mal lugar tanto a Piqué como a Eric García, que pasarían a ser segundo plato para Xavi Hernández. Ya solo con la intención el entrenador lanza un mensaje que transmite poca confianza sobre ellos y son dos de los grandes señalados del desastre del año pasado.