¡Por fin! Griezmann hace público el motivo por el que no es el que era
La noticia ha dejado sin palabras a muchos barcelonistas
Antoine Griezmann está viviendo sus horas más bajas como futbolista. Si el año pasado estuvo ya lejos de su nivel y se mostró poco participativo en el terreno de juego, este año está siendo aún peor porque ni tan siquiera está haciendo goles. La pasada temporada, aún siendo una de las peores del francés desde que está en LaLiga, terminó con 15 goles en la buchaca (9 de ellos en LaLiga) pero este curso va camino de quedarse en unos guarismos mucho más pobres si cabe.
Lo que muchos se preguntan es qué le ocurre al jugador galo para que no pueda poner en marcha todo el fútbol que lleva dentro. La versión de Antoine en Barcelona es muy diferente a la del delantero que se pudo ver en el Atlético de Madrid y en su selección durante el mundial de Rusia, donde además fue Campeón del Mundo. En el Camp Nou no se ve a ese jugador atrevido, con personalidad, que crea peligro constante y que marca y sonríe con facilidad.
En Barcelona lo que ven es a un futbolista que no destaca por nada, que no encuentra espacios ni parece entenderse con sus compañeros, que deambula por el campo con cierta apatía, desgana y desilusión, como si no disfrutase de lo que está haciendo y estuviese sufriendo por dentro.
Pero todo esto ha quedado un poco más contextualizado al postear el propio jugador en su instagram una foto en la que se le ve a él en primer plano con el estadio culé de fondo vacío. La instantánea fue tomada el pasado miércoles en el partido de Champions que enfrentó a los catalanes y al Dinamo de Kiev y en la que el principito volvió a mostrar su peor versión. Sobre la imagen Griz añade que echa mucho de menos a la afición, a su público y de ahí que no esté pudiendo dar lo mejor de sí mismo.
Está claro que hay jugadores a los que no tener cerca el aliento de la afición les afecta más que a otros y esto podría ser lo que le esté ocurriendo a Griezmann. Al menos así lo ve él. Lo que está claro es que el público tardará aún meses en llegar a los estadios y hasta entonces el 7 del Barça tendrá que ingeniárselas para poder mostrar su mejor versión o, a quien se le acabará la paciencia, será a la nueva directiva que está por llegar.