Por el canterano culé, Hansi Flick no quiso a Kimmich, será el relevo de Sergio Busquets y costó 0M
El técnico blaugrana ve grandes similitudes con el mediocentro alemán
Después de alinearlo en Valencia, Hansi Flick dejó muy claras las razones por las cuales no consideró fundamental que el Barça fuera con todo a por el fichaje de un mediocentro como Joshua Kimmich. Y es que con el gran partido que hizo Marc Casadó, el conjunto blaugrana ha visto como tenía, en casa, al mejor relevo posible de Sergio Busquets para el mediocentro. Un jugador que no ha costado ni un euro y que, además, ha demostrado poder cubrir el puesto a la perfección.
Tanto gustó a Flick el partido del canterano de 20 años que, el técnico germano lo comparó a Joshua Kimmich, uno de los jugadores cruciales de aquel Bayern de Múnich que lo ganó todo en 2020. Unas palabras, las del alemán que dejan muy claro qué es lo que ve en un Marc Casadó que, tras ser pasado por alto por Xavi a lo largo de la pasada temporada, ahora apunta a tener un papel trascendental en esta 24/25, pues ya fue titular en el estreno liguero.
Y es que, al ser preguntado sobre la comparación con Kimmich, Flick aseguró que veía de cosas del alemán en la figura de Casadó, en especial en su “forma de correr y al presionar”, dos labores que, desde el adiós de Sergio Busquets, nadie acaba de ejercer como toca para un pivote del Barça.
Pues, por raro que parezca, en el conjunto culé, es el pivote el que marca la salida a la presión, algo que hacía muy bien Busi, pero que hasta la llegada de Casadó nadie supo replicar. Además, la presión siempre ha sido la marca del juego de un Hansi Flick que le da una importancia mayúscula a dicho aspecto, el cual, de la mano de su Joshua Kimmich particular, en Marc Casado, ha mejorado sustancialmente.
Trabajo acompañado de talento
Pese a todo el trabajo sin balón, la realidad es que sin ser un jugador pulcro y eficaz, Casadó no estaría donde está ahora. Y es que, además de trabajar bien cuando toca recuperar, la realidad es que el canterano es un gran llegador y, como demostró en Mestalla, es muy peligroso desde la segunda línea, lo que lo convierte en un perfil hecho a medida para lo que busca Flick.