Piqué lo sabe: la venta que el Barça ha cerrado en la Premier League

El futuro de Moussa Wagué era uno de los asuntos que el Barça debía resolver, pues no entraba en sus planes de futuro. El internacional senegalés llegó al club en 2018, procedente del KAS Eupen belga, después de un pago de cerca de cinco millones de euros. Una apuesta muy importante, por un jugador que era un completo desconocido, pero que había protagonizado un buen Mundial de Rusia. 

En su primera campaña estuvo en el filial, en Segunda División B, si bien era un habitual en los entrenamientos del primer equipo. Y Ernesto Valverde también le dio la oportunidad de debutar en la élite, y disputar varios encuentros, en los que dejó buenas sensaciones. Por ello, esta campaña decidieron hacerle ficha, aunque no tuvo continuidad ni oportunidades. 

Por ese motivo, el pasado mercado inevrnal decidieron colocarle en la lista de cedibles, con la intención de que se fogueara en otro equipo. Y es que tiene buenas cualidades y mucho potencial, pero, a sus 21 años, necesita jugar en un sitio donde pueda sentirse importante, y tener continuidad. Y fue el Niza el que se llevó el gato al agua, y se lo llevó hasta final de curso. 

Pero apenas ha tenido continuidad, primero, porque no entraba demasiado en los planes del entrenador. Y justo cuando estaba comenzando a asomar la cabeza, llegó el parón por el coronavirus. Y, de manera sorprendente y poco entendible, la Ligue 1 decidió darse por finalizada, por lo que su bagaje es de apenas unos pocos encuentros, en los que tampoco ha podido hacer mucho.

Aún y así, eso no ha evitado que el West Ham se haya fijado en él de cara a la próxima temporada, y tenga un serio interés. Y se dice que pronto pueden presentar una oferta en firme a las oficinas del Camp Nou, tasada en unos 12 ‘kilos’.

Gerard Piqué sabe que la aceptarán.