Ousmane Dembélé se va: el Barça ya tiene en mente a su sustituto

No están pudiendo renovar su contrato

En el Barça se muestran poco optimistas con la continuidad de Ousmane Dembélé. El club está haciendo todo lo posible por renovar su contrato, que finaliza en 2022, y están tratando de convencerle para que no se vaya a ninguna parte. Pero ahora mismo se muestran muy precavidos, y son conscientes de que las posibilidades de conseguir retenerle son pocas. Porque, hasta la fecha, todos los intentos que han hecho han sido en vano, y han sido rechazados al instante, prácticamente.

Joan Laporta todavía no arroja la toalla, y confía en poder llegar a un acuerdo cuando regrese de la Eurocopa, en la que actualmente se encuentra concentrado. Tiene en mente la oferta que le hará, y sabe que la continuidad de Ronald Koeman juega a favor de sus intereses. Pero, por otro lado, hay algunos medios que ya dan por segura la fuga de el ex de Stade Rennais y Borussia Dortmund, el segundo fichaje más caro de la historia de la entidad.

Porque han ido más allá, y no han tenido problema en asegurar que tiene un acuerdo verbal cerrado con la Juventus de Turín de Cristiano Ronaldo. En él, se contemplan dos escenarios: el primero es que se marche este mismo verano, y el segundo, que espere a que quede libre, para recalar en el Allianz Stadium a coste cero. Una posibilidad que en el Camp Nou están tratando de impedir sea como sea. Si le pierden, esperan, por lo menos, que deje dinero en las arcas.

Y es que en el Barça ya habrían identificado al que sería su relevo ideal. Y no será Memphis Depay, cuyo fichaje está hecho, y que era completamente independiente a lo que suceda con ‘el Mosquito’. Porque el futbolista al que le han echado el ojo es, nada más y nada menos, que Mikel Oyarzabal, una de las grandes estrellas de La Liga Santander. Es de la misma generación que Dembélé, y hace mucho tiempo que es un fijo en la Real Sociedad.

De hecho, es que ya ha sido capitán en diversas ocasiones, y también suele ir con la selección española.

Tiene una cláusula de rescisión cifrada en unos 70 millones de euros.