El nuevo Barça: dos galácticos, un fichaje, una traición y dos ventas
Messi marca la hoja de ruta
El Barça prepara un mercado estival agitado. Muy agitado. Habrá numerosos fichajes, también salidas, y una revolución en la plantilla, que este año no ha cumplido con las expectativas y no ha dejado un buen sabor de boca a la afición.
La debacle en Anfield ante el Liverpool, en semifinales de la Champions League, y contra el Valencia en la final de la Copa del Rey, ha hecho mucho daño y ha dejado varios señalados, además de la necesidad de fichar más patente que nunca.
Lo primero será un galáctico para completar el tridente ofensivo, ya que Messi y Luis Suárez se han sentido muy solos en el ataque en muchas ocasiones. El que más gusta es Neymar, que volvería a formar el mejor tridente de la historia, pero su fichaje se antoja muy complicado por las altas demandas económicas del Paris Saint-Germain. La otra opción, y mucho más asequible, es Antoine Griezmann, que costaría 120 millones de euros. Sin embargo, ni la plantilla ni la afición le quieren, por lo que puede haber lío.
El otro galáctico por el que se negocia es Matthijs de Ligt, el central del futuro, que formaría un tándem de lujo con Gerard Piqué, al que tendrá la misión, a medio plazo, de hacer olvidar, pues, a sus 32 años, su retirada se acerca. El holandés coincidiría con su íntimo amigo Frenkie de Jong, fichaje cerrado en enero, y al que hay muchas ganas de ver en el centro del campo junto a Arthur Melo.
Por lo tanto, los dos cracks del Ajax dejarían sin hueco a Samuel Umtiti e Ivan Rakitic, que no aceptarían ser suplentes. Tienen ofertas sobre la mesa, de PSG, Inter de Milán y Manchester United, y en el Camp Nou se estudia su salida si a cambio reciben una cantidad importante que les permita abordar el fichaje de Neymar.
Y, si acaba llegando el brasileño, o Griezmann, Ousmane Dembélé tendría decidido hacer las maletas, pues quiere tener continuidad para, por fin, explotar del todo su potencial. Su salida no está programada, ya que en el Barça cuentan con él, pero si no se concreta la salida de Philippe Coutinho, el ex del Borussia Dortmund podría acabar haciendo las maletas.
El Bayern de Múnich ya se ha interesado por él, viendo las complicaciones para firmar a Leroy Sané, del Manchester City de Pep Guardiola.
Una traición, la de Dembélé, que no sentaría nada bien…