Modric es el culpable: el futbolista del Madrid relegado al olvido

El croata está a un nivel excelso

Luka Modric vive un momento de dulce, y no le pesan en su espalda los 35 años que figuran en su DNI. Si bien llevaba un par de temporadas algo por debajo de las expectativas, algo completamente entendible, viendo su edad, el parón por el coronavirus le vino mejor que a nadie. Y volvió mejor que nunca, ofreciendo un nivel sensacional, que todavía a día de hoy sigue mostrando. Lógico que sea intocable en el Real Madrid.

Porque, cuando está fino e inspirado, no hay manera de detenerle ni de frenarle. Zinedine Zidane le ha dado la batuta del equipo, y, cuando el internacional croata tiene el día, el equipo lo nota y para bien. Y, a sus grandes cualidades futbolísticas, de las que nadie duda, se le suma su gran actitud y profesionalidad, su peso dentro del vestuario donde es un líder, y su veteranía, experiencia y jerarquía, fruto de los más de ocho años que lleva en el club.

Y su segunda juventud se ha cobrado una víctima, que ha visto reducidos sus minutos de manera drástica, y que así seguirá siendo durante bastante tiempo más. Porque Martin Ödegaard comenzó como titular, y jugó los dos primeros encuentros de La Liga Santander. Pero no estuvo nada fino, y se le vio algo falto de ritmo, de confianza y de soltura. Necesita mucha más valentía, y tomar más peso a la hora de elaborar y crear las jugadas.

De lo contrario, su sitio estará en el banquillo, que es lo que le está ocurriendo. El entrenador francés espera ver la mejor versión del ex del Vitesse Arnhem, el Stromgodset, el Herenveen o la Real Sociedad, donde maravilló a todos el curso anterior. Pero ahora mismo es muy difícil, ya que con un Modric pletórico, sumado a la presencia de Toni Kroos y Fede Valverde, no tendrá muchas oportunidades de salir desde el inicio.

Por suerte, esto acaba de comenzar, y tiene tiempo de sobra para darle la vuelta a la tortilla. Aunque las primeras críticas y dudas ya han comenzado a salir sobre el internacional noruego.

Tiene mucha presión encima.