Míchel y Oriol Romeu señalan a los 2 culpables y el Atleti todavía pagaría una millonada por uno de ellos

Un futbolista del Girona estuvo cerca del Atleti durante el mercado y quizá Míchel debió hacer caja; el otro, no dio la talla ante el PSV (4-0)

Nada le sale como debería al Girona de Míchel. Pero tampoco el equipo, en los malos momentos, sabe disociar entre aquello que no fluye y el desastre, esta vez ante el PSV (4-0). El filtro no existe y el equipo a veces se desangra. Esto pesa al entrenador y al veterano mediocampista, que no quisieron negar la implicación de dos jugadores en la goleada encajada; uno de ellos, una venta millonaria desestimada en verano ante la llamada del Atlético de Madrid.

El resultado es que la clasificación en la Liga de Campeones se complica, como ya lo está haciendo LaLiga EA Sports, y ese es el problema para el cuadro rojiblanco: corre el riesgo de quedarse en tierra de nadie. De ahí el cabreo monumental del técnico con los errores de concentración de sus jugadores, especialmente de dos: Arnau Martínez y David López.

En las fotos de otro desastre

Para el preparador madrileño y el medio centro de los blanc-i-vermells no se trata de buscar unos únicos culpables en caliente, pero es inaceptable, más en una competición tan drástica como la UCL, dejar ir puntos y encajar goles por fallos evitables.

Arnau y David López estuvieron en las fotografías más llamativas del duelo, salvo alguna honrada excepción. El primer tanto resulta de un despiste del central, que además desvía la pelota al fondo de la red; el segundo llega por el carril del lateral, donde Malik Tillman entra solo hasta la cocina. Y encima Arnau se cargó el partido con doble amarilla, ambas evitables. Oriol Romeu era claro por ello tras el duelo: “la expulsión ha hecho daño. Hasta ese momento ellos estaban siendo superiores, pero tras la expulsión no hemos tenido ninguna opción de hacer daño”.

La que pudo ser una venta millonaria

En el caso de Arnau, Míchel, Oriol y el club no sienten que se hayan equivocado renovándolo desde el vencimiento de su anterior contrato, 2025, al actual, 2027, ni rechazando la tentativa de una entidad que demostró que tenía ganas de gastar y estaba interesado en él, como es el Atlético. Pero la sospecha está sembrada y ahora se le va a mirar con lupa.

Quizá el problema para el Girona sea el punto de referencia tras una temporada pasada para enmarcar. Es posible. Con todo, Míchel, como Oriol, creen que es preferible exponer los errores de forma clara para que no se repitan, y eso, al menos esta vez, va por el lateral y el central.