Messi lo echa: Koeman fracasa y no logra reconciliarlos

Ronald Koeman está tratando de conseguir que Antoine Griezmann y Leo Messi se entiendan mejor sobre el terreno de juego. Porque, sin dudas, muchas de las esperanzas que tiene el Barça están depositadas en ambos cracks, que no acaban de hacer buenas migas fuera del césped. Pero eso no importa, mientras tengan buena química en él, algo que no pudieron conseguir el pasado curso. Y le costó la suplencia al internacional francés.

Ambos se mueven por una zona de influencia muy similar, y se estorban el uno al otro. El plan del holandés era colocar al ex del Atlético de Madrid de Diego Pablo Simeone y de la Real Sociedad en punta de ataque, pero ya ha visto que esa no es su posición, y ha renunciado. Y, ante el Villarreal de Unai Emery, en su debut en La Liga Santander, decidió hacer un cambio de rol, y colocar al ‘10’ arriba, y al ‘7’ en la derecha, haciendo un intercambio de posiciones.

Pero tampoco funcionó. Porque el campeón del Mundial de Rusia en 2018 sigue sin responder a las expectativas le pongan donde le pongan, y comienza a agotar la paciencia de todo. El astro argentino, por su parte, no hace falta decir que es el mejor en cualquier sitio, si bien ya pasó su tiempo de ser falso nueve. Ahora, necesita jugar mucho más liberado, en una posición más retrasada, y entrando constantemente en contacto con el balón.

Por lo tanto, el aviso de Messi está más que claro. Si Griezmann no espabila, tocará dar un paso al lado, y que deje su hueco a otro. Y más, viendo al gran nivel al que están rindiendo piezas como Anssumane Fati, Philippe Coutinho o Francisco Trincao, que ha dejado grandes destellos. Y sin olvidar a Ousmane Dembélé, que regresa tras una larga lesión, o Pedri González, que también ha dejado buenas sensaciones, y al nuevo fichaje que pueda llegar para la delantera.

Koeman todavía no tira la toalla, y tiene como una de sus misiones y de sus objetivos prioritarios recuperar a ‘El Principito’.

Pero no se lo está poniendo nada sencillo.