Al Madrid y Florentino se les escapan dos sueños, al peor rival

Recalarán en LaLiga

No será de fácil digestión para la hinchada del Valencia esta temporada tan aciaga donde todas las expectativas que pudieran tener los aficionados valencianistas o cualquier analista sobre las posibilidades de una buena plantilla, se han echado por tierra. Y es tan grande la desilusión con la actual campaña, que el club ha puesto a todos sus jugadores en el disparadero y espera traer a dos sueños perdidos del Real Madrid.

Y ambos serían refuerzos, al menos en nombre y calidad, que ayudarían a la parroquia ché a lamer sus heridas, que no son pocas. David Silva es el primero de la lista y su llegada, pese a sus 34 años, se espera como agua de mayo. Silva pertenece a esa última generación de oro que marcó a los hinchas de Mestalla y cuya salida, junto a la de otros referentes como Juan Mata o David Villa, fue el comienzo de una ruta sin horizonte.

El genial y veterano futbolista canario arribaría en Mestalla gratis ya que su vinculación con el Manchester City queda totalmente cumplida. Sobre ello, se esperaba que el zurdo pusiera rumbo a Estados Unidos pero le seduce demasiado volver a España como para dar un cambio tan radical a su vida en el país de las barras y estrellas. Por todo ello, todo hace indicar que si el Valencia aprieta cerrará a Silva en unos días.

Algo similar ocurre con Kepa Arrizabalaga, portero del Chelsea que mantiene una dura pugna con su actual entrenador, Frank Lampard, el cual no le quiere. Difícilmente podrán los blues sacar el dinero que pagaron por el cancerbero, y menos en Valencia, pero lo que sí quieren es quitar el ruido que rodea al portero español cediéndole una o dos temporadas. En este sentido, el club londinense, aprovechando que los valencianos han puesto a su plantilla la tarjeta de transferible, podría pedir a cambio a ciertos futbolistas. Todo se acelera.

Curiosamente tanto Silva como Kepa fueron dos sueños perdidos de Florentino Pérez, presidente del Real Madrid, y seguramente no le hará ninguna gracia al mandatario tenerlos enfrente a diario en LaLiga. Silva rechazó al Madrid y Zidane negó a Kepa cuando ya lo tenía hecho por el cuadro de Chamartín, y ahora ambos pueden llegar de la mano a uno de los adversarios ancestrales del club de Chamartín en la competición doméstica. El conjunto ché ha sido el peor rival del Madrid en materia de fichajes: siempre le ha puesto unas condiciones prohibitivas.