Los socios culés dictan sentencia definitiva contra Leo Messi
Los precandidatos tienen claro por primera vez lo que deben hacer y lo que no
La encuesta ha revolucionado al club por completo. Nadie se esperaba en el FC Barcelona que uno de los diarios deportivos de la ciudad fuese a publicar una macro encuesta en este inicio de año y que en ella se planteasen dudas de tantísimo calado como las de la continuidad de Leo Messi o el regreso del brasileño Neymar Junior al club. Han sido 220 socios los que han tenido que responder a las preguntas planteadas por Time Consultants, la empresa encargada de realizar el sondeo y los resultados ya son conocidos.
Lo más significativo de la encuesta es la división que existe entre los socios culés a cerca de la conveniencia, o no, de hacer un gran esfuerzo para renovar a Leo Messi. Casi el 47% de los socios opinan que el club no debe tener afán alguno por retener al 6 veces ganador del Balón de Oro. Sorprende que el número de socios descontentos con el argentino sea tan alto por tratarse del mejor jugador de la historia del club de largo. Pero el sondeo también arroja un dato demoledor y que explica la causa de este hartazgo: el burofax.
Los precandidatos tienen, gracias a este documento, una pista muy clara de hacia dónde deben dirigir sus políticas si quieren contar con el apoyo mayoritario de la masa social blaugrana. Los socios han hablado y ahora falta que alguien les escuche y sepa conectar con ellos antes del próximo día 24. Aunque lo primero es lo primero y el día 11 cada uno de ellos deberá presentar las 2.257 firmas necesarias para poder ser denominados candidatos oficiales.
Y si las cosas se han aclarado bastante con respecto a Messi, ¿qué ha ocurrido con Neymar? Pues bien, más de la mitad, el 50,5% de los socios encuestados no fijarían a Neymar bajo ningún concepto. Frente a ellos, tan solo el 24,5% lo firmaría siempre y cuando fuese viable para el club francés y ojo, solo el 5,5% lo harían a toda costa. Los incondicionales de Ney se han quedado en un grupo reducido a la nada prácticamente.
Lo dicho, ¿qué candidato sabrá reorientar mejor su campaña teniendo en cuenta toda esta cantidad de datos?