Los cimientos tiemblan: aficionados ‘piden la cabeza’ de Florentino

Parte de la afición está harta del máximo gestor y responsable del rumbo deportivo del club, muy deficitario desde hace varias temporadas

El nivel del Real Madrid tras la final de la Champions League de 2018 es impropio de la entidad, y no tanto por los títulos o la ausencia de ellos, sino por los continuos diseños fallidos de plantilla unos que repercuten en el juego, en el día a día, y todos ellos ya llegaban en su esbozo con preaviso de cadencias irreparables que iban a notarse sobre el terreno de juego, como así ha sido. Y si uno quiere señalar al culpable en todas y cada una de esas temporadas este no es un jugador específico ni siquiera Zidane, que solo ha estado en dos. No, el fallo definitivo convendría achacárselo al gestor principal: Florentino Pérez.

Como el presidente se ha perpetuado en el club, es muy complicado que desde dentro se pueda organizar un motín efectivo contra su gestión, pero lo cierto es que a nivel deportivo el Madrid ha dado varios pasos atrás muy preocupantes que especialmente cabrean a una gran parte de la afición por el poco juicio de la decisiones y como todas ellas, erróneas a priori, han acabado de la misma manera: sin éxito y mucho sufrimiento. Y llegados a este punto, en pleno mes de enero de 2021 y fuera de tres de la cuatro competiciones que tenía en juego el Madrid, solo puede haber un señalado, al menos uno por delante del resto: el presidente.

Esta temporada no se fichó y la única esperanza fue un Martin Odegaard que ya está fuera en menos de 4 meses. Como Jovic, por el que se invirtieron 60 millones de euros del club. Como Militao, con otros 50. Como Odriozola, que valió 40. Como Mariano, Vinicius, Hazard… Pero las equivocaciones esta campaña llegaron mucho antes, malvendiendo a un Hakimi Achraf en cuyas continuadas ausencias de Dani Carvajal se habría convertido en una llave de éxito. Y con la venta inexplicable de Sergio Reguilón, quedándose como agravante con Marcelo, un jugador que ya hace dos temporadas que está fuera del nivel que requiere el Madrid. Por si fuera poco, a estas alturas no solo se pierden títulos antes siquiera de ser candidato a ellos (LaLiga está imposible en solo 4 meses; en la Copa cayeron de nuevo eliminados, esta vez ante un Segunda B y en octavos; y en la Supercopa no se alcanzó la final) sino que la deriva de pérdida de efectivos continúa: hay una enorme polvareda con el caso Sergio Ramos y Lucas Vázquez. Pero hay más, mucho más.

Florentino y no Zidane es el responsable de los grandes males deportivos de este equipo, unos que solo son atribuibles a su figura: renovó a Gareth Bale e Isco Alarcón, entre otros; fichó por un salario desproporcionado a Mariano, que no da el nivel; regaló a James Rodríguez, por el que el Madrid no ha ingresado ni un euro después de pagar 75 millones por él; vendió a piezas que hoy valen dos o tres veces más como Theo Hernández o Marcos Llorente; se quitó de encima a Cristiano Ronaldo sin un sustituto, y, entre otras muchas cosas, comentan muchos aficionados en las redes sociales, metió al Madrid en el peor momento en un proyecto millonario de dudosa ejecución, el del Santiago Bernabéu, que ahoga al club y cuyo beneficio es más que discutible. Suma y sigue. En materia de fichajes dejó ir a Haaland y Mbappé recientemente, se le está complicando Alaba, y en su haber quedan fracasos como los de David Silva, Sergio El Kun Agüero, Paul Pogba, Luis Suárez, David de Gea o los mismos Frank Ribery y Neymar Júnior, que aunque queden algunos lejos, se le recuerdan al mandatario.

Pero centrándonos en los problemas presentes, hay mucho donde hurgar en la herida. De hecho la actuación renqueante blanca en las tres últimas campañas, donde la base es la misma que la de hace 4 años (Kroos, Modric, Casemiro, Varane, Benzema…), no parece que vaya a cambiar, ya que el club no tiene dinero para afrontar fichajes galácticos, y eso que Mbappé lo está poniendo bien fácil. La humareda mediática se cierne sobre Zidane, Éder Militao, Álvaro Odriozola o Martin Odegaard, que son a los que señalan los titulares, pero para cada vez más aficionados merengues, que se manifiestan en las redes sociales, ven que en todos estos males solo hay un común denominador: Florentino Pérez.