Lo nombraron heredero de Messi antes de Yamal, pero el anuncio de Xavi lo deja fuera del Barça 24/25

La continuidad del entrenador, una pésima noticia para el crack español

La reciente confirmación de que Xavi Hernández seguirá siendo el entrenador del FC Barcelona hasta 2025 ha generado un cambio de perspectiva en el futuro de algunos jugadores del equipo culé, entre ellos Ansu Fati, quien ha visto sus opciones de brillar en el Barcelona mermadas por la continuidad del técnico de Terrassa.

Fuentes cercanas al club sugieren que el joven delantero podría ser una de las ventas planificadas por Joan Laporta, presidente del Barcelona, para reestructurar el equipo y enfrentar los retos futuros, algo que implicaría poner fin a su sueño de triunfar con la elástica culé.

No olvidemos que, antes de Lamine Yamal se convirtiera en la gran sensaicon del proyecto, Ansu estuvo considerado el perfecto sucesor generacional de Leo Messi, pero sus dos graves lesiones de rodilla echaron por tierra su progresión hasta terminar convirtiéndose en un estorbo para los citados Laporta y Xavi.  

La presencia de Xavi Hernández como técnico del Barça hasta 2025 implica una apuesta a largo plazo por un proyecto de juego basado en la filosofía y estilo característicos del club. Sin embargo, esta continuidad también podría significar un periodo de transición y adaptación para algunos jugadores, como Ansu Fati, cuyo desarrollo podría verse afectado por la estabilidad del banquillo.

Ansu Fati, considerado una de las joyas más preciadas de La Masia y del fútbol español en general, ha enfrentado numerosas lesiones que han interrumpido su progresión en el Barcelona. Si bien ha demostrado destellos de su enorme talento en el terreno de juego, la falta de continuidad y la competencia en la plantilla han obstaculizado su consolidación como titular indiscutible.

Con Xavi al mando, se espera que el Barcelona realice una serie de movimientos en el mercado de fichajes para reforzar el equipo y adaptarlo a las necesidades del técnico catalán. En este escenario, Ansu Fati podría convertirse en una moneda de cambio para obtener los recursos necesarios para fichajes estratégicos que fortalezcan al equipo en diversas posiciones.