Se lo dice a Bartomeu: el crack arrepentido de no ir al Barça en enero

Le gustaría echar atrás en el tiempo

Dani Olmo tuvo opciones para elegir el pasado mes de enero. Porque tuvo ofertas muy interesantes sobre la mesa, para dar el paso y abandonar las filas de un Dinamo de Zagreb que ya se le había quedado muy pequeño. Entre los interesados, estuvo el Real Madrid, pero sobre todo, el Barça, que lo quería para ser el relevo de Ousmane Dembélé, completamente sentenciado.

No obstante, finalmente Josep María Bartomeu cerró la contratación de Francisco Trincao, desde el Sporting de Braga, a cambio de 30 millones de euros. Porque el internacional español prefirió marcharse a un club donde pudiera ser más importante, tener más minutos, y crecer más como jugador. También, pensando en sus posibilidades para ir a la Eurocopa. 

Y su elección fue el RB Leipzig, que hizo una apuesta muy importante, siendo el fichaje más caro de su historia. Pero las cosas no le han acabado de ir como se esperaba al de Terrassa, que confiaba en una adaptación mucho más rápida y sencilla de lo que está teniendo. Obviamente, el parón por el coronavirus ha sido un hándicap importante, ya que se ha encontrado completamente solo en un país extranjero. 

Además, el técnico, Julian Nagelsmann, no ha acabado de contar con él como se esperaba. Ha tenido cierta importancia en sus planes, y ha jugado los últimos dos encuentros, pero tampoco ha hecho nada destacable. Y antes de eso, venía de una serie de cinco choques en los que no jugó prácticamente ni un solo minuto. A sus 22 años, necesita más confianza.

Olmo ya ha dado muchas vueltas a su caso, y cree que tendría que haber regresado al Barça, el club de sus amores, y en el que se formó. Porque es un tren que solo pasa una vez en la vida, y no lo cogió.

Puede ser la última vez que pase.