Llegó como suplente de Koundé y Araújo, ahora es indiscutible y Bin Salmán quiere robárselo al Barça
El Newcastle vuelve a las andadas en el campeonato español
Pagar 70 millones el verano pasado por Alexander Isak fue una declaración de intenciones del Newcastle que solamente supuso el primer golpe del conjunto inglés a LaLiga. Mohamed bin Salmán, propietario del club, está dispuesto a seguir agitando la contienda de fichajes y el nuevo objetivo fijado por el jeque saudí en España mira al Camp Nou... al mismo tiempo que supone un motivo de mucha preocupación para Xavi Hernández: Andreas Christensen.
El central danés formó parte del capítulo de incorporaciones cerradas por Joan Laporta en la postrera ventana de transferencias veraniega y, aunque este movimiento se dio con vistas a que el jugador fuese la opción B a Ronald Araújo y Jules Koundé en el eje defensivo, poco a poco sus prestaciones han ido sorprendiendo más a Xavi hasta convertirse en una pieza indiscutible en el ‘11’ del técnico culé.
Cabe mencionar que Christensen cayó lesionado en el último encuentro disputado por el equipo y actualmente el jugador se encuentra en el dique seco, pero en condiciones normales cuenta con un rol muy importante en la plantilla que le sitúa como una de las revelaciones de la temporada en el FC Barcelona.
No obstante, este tipo de irrupciones también suelen tener efectos peyorativos y Bin Salmán quiere aprovecharse de la delicada situación económica que sufre la entidad blaugrana para hacerse con los servicios del jugador escandinavo de 26 años.
Aunque el mandatario del Newcastle aún no ha destapado la cifra que pretende poner sobre la mesa para intentar convencer a Laporta, la buena disposición económica del club inglés deja entrever que la ofensiva podría extenderse hasta los 50 millones, una cifra que difícilmente sería rechazada por el club español a pesar de que Christensen se ha convertido en una pieza indiscutible en el equipo de gala de Xavi.
A colación de esto, si finalmente se concreta este acuerdo el técnico también tendría aquí una noticia positiva ya que esa cantidad de millones podría invertirse en reforzar alguna de las posiciones que apremian la llegada de refuerzos, como es el caso del lateral derecho o la delantera.