Le humillan, emula a Griezmann y vuelve al Atlético de Simeone

El jugador ilicitano, Saúl Ñïguez, se ha despedido formalmente del que ha sido su club esta temporada, el Chelsea, tras éste no haber decidido alargar su cesión del Atlético. El club inglés, también lo ha hecho oficial confirmándose así definitivamente la vuelta de Saúl la temporada que viene al conjunto dirigido por Simeone. La poca continuidad y la poca confianza de Thomas Tuchel en el canterano rojiblanco se antojan como las claves de un retorno esperado por muchos dados los acontecimientos con el jugador.

Lo cierto es que nadie duda de las cualidades de un gran jugador en Europa como es Saúl, pero en ningún momento del curso se ha encontrado a ese futbolista que maravilló a todos con sus goles espectaculares. No parece haberse sentido cómodo ante el imponente ritmo de juego que se imprime en los partidos de la Premier, y su poca seguridad en una zona tan vital como la del centro del campo tuvieron consecuencias para él.

Recordemos que Saúl afirmó que necesitaba salir del Atlético porque quería volver a jugar y a entrenar en su posición, la de mediocentro, en lo que parecía un claro pulso a la idea de Simeone de colocarle como carrilero izquierdo. Sin embargo, bien sea por el estilo de juego del Chelsea, cuya inmensa cantidad de mediapuntas retrasaba a Saúl a la zona de creación, o por el propio rendimiento del jugador, las cosas no se han dado como se esperaba.

Al menos, en el aspecto mental, se espera que la experiencia haya ayudado a un Saúl, que como bien comentó en su salida, necesitaba salir de su zona de confort para experimentar nuevos retos lejos de Madrid. Ahora, en el deseo de todos estará ver a un jugador con las pilas cargadas y con la ambición de volver al estado de forma en el que se encontraba. Un reto en el que seguro ayudará un Simeone que siempre creyó en lo que Saúl aporta al Atlético más allá de que fuera suplente en varios partidos de la temporada. La importancia de recuperar entre todos al gran jugador que sigue teniendo el respaldo de la afición pese a su decisión de salir el año pasado.