Laporta y Florentino Pérez se despiden de uno de sus grandes objetivos

Barça y Real Madrid deben olvidarse de él

Joshua Kimmich era el gran sueño tanto del Barça, como del Real Madrid, y no es para menos. Porque estamos hablando de uno de los mejores jugadores del planeta, y de uno de los mejores cracks que han salido de Alemania en este siglo, y probablemente, en toda la historia. Basta con verle jugar unos minutos para darse cuenta de que es diferente al resto, y de que tiene unas cualidades sensacionales, y una inteligencia muy por encima de la media.

Además, cuesta mucho encontrar a otros futbolistas con tanta polivalencia. Porque el crack del Bayern de Múnich puede actuar en prácticamente cualquier puesto. Su rol ideal es como pivote defensivo, pero, cuando juega como interior, también exhibe una llegada al área rival brutal. Y donde más ha jugado ha sido de lateral diestro, siendo el sucesor de Philipp Lahm, puesto en el que también es uno de los mejores del Mundo. En caso de emergencia, ha sido usado de central, y en la Eurocopa, con la selección germana, actuó de carrilero.

A sus 26 años, es todo un líder fuera y dentro del campo, y todos los entrenadores destacan su madurez y su profesionalidad. Por ejemplo, Pep Guardiola, que solo le tuvo una temporada, ya avisó a todos del tremendo potencial que tenía, y de que llegaría muy lejos. Por eso, se lo ha intentado llevar en varias ocasiones al Manchester City, sin éxito alguno. Aunque ahora estaban ante una oportunidad irrepetible, pues su contrato finaliza en 2023.

Y, hasta la fecha, todas las propuestas de renovación que le habían presentado habían sido descartadas casi al instante. Se especulaba con su deseo de abandonar la Bundesliga, y Joan Laporta y Florentino Pérez tardaron muy poco en llamar a su puesta, junto al resto de grandes clubes de Europa. Entre ellos, también estaba la Juventus de Turín de Cristiano Ronaldo, el Paris Saint-Germain de Mauricio Pochettino o el Liverpool de Jürgen Klopp.

Pero en el Allianz Arena se han salido con la suya, y han conseguido que Kimmich de el visto bueno a la última oferta.

Es decir, que seguirá en el Bayern, al que ahora dirige Julian Nagelsmann.