Laporta toca donde duele al Real Madrid: el Barça se mete en medio de Florian Wirtz y Xabi Alonso

El jugador y el entrenador, dos de los responsables de la buena marcha del Bayer Leverkusen, en el radar culé

El Real Madrid tiene una seguridad casi plena de que la etapa, ciertamente exitosa y sobre todo estable, de Carlo Ancelotti en el club vive esta temporada su última campaña: el entrenador italiano ha cumplido, y el club y el mismo míster tienen horizontes separados en 2024, siendo en el primer caso Xabi Alonso el entrenador que más gusta y en el segundo teniendo casi por segura la salida del italiano hacia la canarinha. Hasta aquí, planteamos un esbozo que ya os hemos comentado, el problema es que Joan Laporta y el Barça se han metido en medio.

Interés del Barça

Uno de los grandes atractivos en este Bayer Leverkusen de Xabi Alonso, su gran estrella, es un Florian Wirtz al que el Madrid ha echado el guante y quiere introducirlo como parte de la posible operación por Xabi Alonso si el donostiarra acepta el puesto que dejará vacante en el banquillo del Santiago Bernabéu Carlo Ancelotti, pero, claro, el Barça ahora también quiere al jugador germano, que ve como un potencial nuevo Bellingham o Pedri.

Mundo Deportivo asegura que el FC Barcelona incluso ya ha puesto en alerta al club alemán con su interés en el 10 de su equipo, donde el mass media, certifica que si bien desde la entidad de la aspirina saben de ese ataque en potencia, también del blanco, están hasta cierto punto tranquilos por el precio que costaría sacar a Wirtz del equipo alemán, nada menos que 100 millones de euros.

Bellingham

Para el Madrid es un incordio y un problema que el Barça se meta de cualquier forma en medio de una iniciativa que, si bien no está estructurada y formada, como es el ataque junto a Xabi Alonso de Florian Wirtz, sí gusta y en cierta forma se ve en el coliseo blanco como una posible réplica del caso Jude Bellingham, por el que se ha pagado más de 100M y ha resultado ser un absoluto acierto. En cualquier caso, el envite blanco y culé va a de la mano.