Laporta pone fecha a Dembélé y destapa su mejor baza para convencerle
El conjunto blaugrana quiere finiquitar el culebrón próximamente
La temporada del FC Barcelona se ha echado a perder tras sendos tropiezos frente al Eintracht de de Frankfurt, el Cádfiz y el Rayo Vallecano, tres encuentros que se han saldado con tres derrotas en el Camp Nou. Eso sí, aunque muchos jugadores están rindiendo por debajo de lo esperado y fruto de ello el equipo se ha despedido de sus opciones de ganar algún título esta campaña, Ousmane Dembélé se encuentra en un estado de forma espléndido y a día de hoy es la gran arma ofensiva del equipo, como bien ha quedado a la vista en el último mes de competición.
Casi todos los ataques del Barça pasan por las botas del francés que, no obstante, sigue teniendo en vilo a la directiva del club y a los aficionados por su expiración de contrato el próximo 30 de junio. El factor económico ha distanciado enormemente las posibilidades de Joan Laporta de cerrar la renovación del galo, pero recientemente Fabrizio Romano ha afirmado que el conjunto blaugrana aún tiene una baza extra para poder convencer al galo, Xavi Hernández.
Y no solo eso, además, la directiva está decidida a finiquitar en los próximos 15 días este culebrón para actuar en consecuencia: si finalmente el jugador decide marcharse, estrechar lazos de una forma más cercana con Raphinha, el candidato favorito de la directiva para tomar su relevo; o, si decide permanecer en la Ciudad Condal, anunciar el acuerdo lo antes posible.
Precisamente esta es la vía que lleva tratando de cerrar la directiva culé toda la temporada, pero sin éxito. Las rencillas entre el jugador y el club para renovar conllevaron que Xavi apartara a este del equipo durante algunos partidos de enero, pero rápidamente el técnico se dio cuenta del error fatal que estaba cometiendo dejando fuera a uno de los futbolistas más desequilibrantes del mundo.
Y el propio Xavi, para alegría de Laporta, es la gran baza del club para terminar de convencer a un Dembélé cuya salida de Barcelona ya no está garantizada. Al parecer, el francés se encuentra muy feliz trabajando al lado del entrenador de Terrassa y esto podría ser vital para alterar su decisión de forma gratificante para los intereses culés.