Laporta, al borde del ridículo más histórico con Lewandowski y Dembélé

La situación en el Barcelona es límite y tienen que trabajar en desbloquearla de forma inminente

Está empezando a temer por su situación el Fútbol Club Barcelona. El conjunto culé es, actualmente, el equipo que más dinero se ha gastado en el mercado de fichajes con una inversión total de 153 millones de euros toda vez que ha conseguido dar vía libre y activar las famosas palancas económicas que le dan liquidez inmediata pero que hipotecan el futuro de la entidad, aunque ahora puede verse con que esa auténtica millonada está a punto de caer en saco roto si no se soluciona el inminente problema que tiene enfrente.

Y es que cuando quedan apenas ocho días para que LaLiga dé comienzo (este año más pronto que nunca como consecuencia de la disputa del Mundial en invierno), el Barça se encuentra con que todavía no ha podido inscribir a ninguno de sus fichajes y tampoco a sus renovaciones según informa la Cadena Cope. Es decir, que ahora mismo Lewandowski, Raphinha, Kessié, Christensen, Koundé, Dembélé, Araújo o Sergi Roberto no podrían jugar la competición doméstica ya que la delicada situación económica en la que se encuentran los catalanes le dejan todavía sin margen de maniobra para poder realizar su inscripción. 

 

Laporta, manos a la obra

Ante esta situación límite, ya que el margen de tiempo es de poco más de una semana, Joan Laporta se ha puesto a trabajar a destajo para solventarla y poder realizar la inscripción en LaLiga de todos sus cracks. El momento preocupa, pero el Barcelona tiene un plan y es que puede activar otras palancas económicas que tiene en la recámara, es decir, vender más parte de su patrimonio para obtener liquidez a corto plazo aunque eso suponga una merma de ingresos en el futuro, y de esta forma podría proceder a inscribir a todos estos jugadores.

No obstante, el Barça tendrá que darse prisa porque el control de LaLiga es muy estricto y puede encontrarse con nuevas sorpresas a la hora de gestionar los trámites. Sería un palo tremendo y un ridículo histórico que, después del gigantesco desembolso realizado, los Lewandowski, Raphinha y compañía no pudieran jugar con el primer equipo. Y que no fueran los únicos porque los culés siguen peinando el mercado y esperan a Azpilicueta, Marcos Alonso o Bernardo Silva.