Lamine Yamal, a por otro récord, directo al 11 del Barça y Laporta se rinde a él como De la Fuente
El partido contra el Betis puede significar un nuevo hito histórico para el canterano
El Barça de Xavi ya encara la vuelta a la actividad liguera con el próximo partido que enfrentará a los culés contra el Betis en un choque de poder a poder que será muy distinto a los anteriores, pues los verdiblancos prometen dar guerra en un enfrentamiento donde todo apunta a que Lamine Yamal puede ser protagonista de nuevo.
Luis de la Fuente no será el único en apostar
Es evidente que apostar por darle la titularidad a un jugador de apenas 16 años recién cumplidos no es lo más natural del mundo, mucho menos en un club como el Barça o en una selección absoluta como ha sucedido en la española. Sin embargo, con un caso tan excepcional como el de Lamine Yamal, lo normal no existe, pues es un jugador, cuyo nivel está fuera de lo normal y su ascenso meteórico obliga a tomar decisiones inéditas respecto del talento de la Masía.
El hispano marroquí apunta a volver a ser de la partida en el choque que enfrentará a culés y béticos, un partido que, al igual que el España – Georgia podría ser histórico por albergar el gol más joven de la historia, pues Lamine Yamal está rompiendo todos los récords establecidos. En el caso que no ocupa, pudiendo convertirse en el goleador más precoz de la historia del Barça, superando a Ansu Fati.
Todo el barcelonismo rendido a su joya
Desde que Leo Messi se fue del Barça, no ha existido un jugador de tanto desequilibrio como el argentino. Es cierto que Lewandowski ha aportado ese valor de superestrella, pero su juego no entra por los ojos como el del argentino, que parece haberse reencarnado parcialmente en un Lamine Yamal que, al igual que el mítico 10 del Barça, es capaz de poner de pie a la afición y salir aplaudido de los campos rivales.
Y es que, Laporta, al igual que el resto de culés, está encantado con lo que está logrando el fenómeno Lamine Yamal, un niño de 16 años recién cumplidos que ha devuelto la ilusión perdida con Ansu Fati a todo el barcelonismo, que tiene a uno de esos jugadores por los que se paga encantado el precio de la entrada.