La maldición de Antoine Griezmann de la que todos hablan en el Barça
Hay un dato que no pasa desapercibido
Casualidad o no, el Barça no levanta ningún título desde que Antoine Griezmann aterrizó en el club. Pocos meses antes de su presentación, se habían coronado campeones de La Liga Santander con una facilidad pasmosa, y esperaban revalidar el título. Y más, viendo el mal momento del Real Madrid de Zinedine Zidane, o el éxodo de estrellas que sufrió el Atlético de Madrid de Diego Pablo Simeone, entre las que se incluyen al galo.
Cierto es que no era necesario, pero Josep María Bartomeu se encaprichó del canterano de la Real Sociedad, para formar un equipo temible, con lo que ya había, además de Frenkie de Jong, el otro gran movimiento que hicieron. Pero, por sorpresa, no han vuelto a saborear la gloria. El título de liga fue para los blancos, en la Copa del Rey fueron eliminados por el Athletic Club de Bilbao, y en la Supercopa de España cayeron ante los colchoneros, y este año, ante los vascos, que se han convertido en su verdugo.
Por no mencionar lo ocurrido en la Champions League, de la que es mejor ni hablar. Y lo peor es que esta campaña también tienen complicado ganar algo, pues en el campeonato doméstico están muy lejos de los del ‘Cholo’, y en la Copa de Europa no les dan opciones. Su único consuelo sería la copa, que no soluciona una temporada tan mala como la que están haciendo. Y muchos creen que el campeón del Mundial de Rusia en 2018 arrastra una maldición.
Porque al Atleti ya le pasó algo similar. De ganar varios títulos, pasaron a no ganar ninguno con Griezmann en la plantilla durante un tiempo largo. Solo una Supercopa, cuando llegó, en 2014, y nada más hasta 2018, momento en el que celebraron la Europa League y la Supercopa de Europa. Y, ahora que ya no tienen al internacional francés, van camino a levantar de nuevo la liga. Una extraña coincidencia, que en el vestuario azulgrana no han pasado por alto.
Y algunos se atreven a señalar al crack de 29 años como ‘gafe’. La realidad es que, desde que firmó, solo han ocurrido desgracias.