Koeman va a por él, le quiere hundir: "es tu momento, o te vas fuera"

El técnico holandés está cansado de las continuas decepciones de sus mejores efectivos

Aunque las sensaciones mostradas sobre el Juventus Stadium en el último compromiso europeo han sido gratamente esperanzadoras, Ronald Koeman aún tiene muchas dudas acerca de la situación de algunos de sus mejores jugadores. El quebradero de cabeza que más dolores le está produciendo, Antoine Griezmann.

El futbolista francés es un ‘toma y daca’ de sabores agridulces. No termina de desempolvar su calidad y para colmo, cada vez entra menos en los planes del equipo. Aunque su participación en el último partido frente a la Vecchia Signora no fue de las peores ofrecidas durante su etapa como jugador culé, aún no ha cuajado en el sistema de Koeman y éste no aguanta más la situación, está dispuesto a sentenciarle. El atacante galo tiene muy claro que su situación no es nada cómoda en Barcelona, pero solamente a cuentagotas parece querer terminar de convencer a su entrenador y a los aficionados blaugranas. Él ha sido uno de los fichajes -sino el que más- más prometedores de las últimas temporadas y, de forma manifiesta, se aleja mucho de rentabilizar el precio que el FC Barcelona desembolsó por él hace más de un año.

Para más inri, otros jugadores de la plantilla que estaban prácticamente fuera unas semanas atrás, como Pedri, Dembélé o Coutinho, están retomando su importancia en el equipo y Koeman está muy convencido de contar con ellos de una forma más regular en los próximos compromisos, algo que podría dinamitar las opciones de Griezmann de triunfar en can Barça.

No obstante, la actuación que evidenció en Turín ha hecho presagiar que todavía algo queda del futbolista que maravilló en el Atlético de Madrid las últimas campañas. No obstante, el holandés considera que su rendimiento debe ser mucho mayor y debe aproximarse al del jugador que marcaba tantas diferencias cuando estaba a las órdenes de Simeone.

El FC Barcelona enfila el próximo choque liguero frente al Alavés con el objetivo de lograr la victoria y de que el francés termine dejando las credenciales que todos esperan en el vestuario: última oportunidad o al ostracismo del banquillo, Griezmann decide su futuro en el club.