Koeman enfila el primer movimiento para retener a Messi: OK del crack

El entrenador holandés deberá seguir reestructurando su plantilla si quiere terminar de convencer al crack

Con la vista puesta en el mercado invernal que está a punto de dar comienzo, Ronald Koeman está planeando algún que otro movimiento para alimentar de savia nueva una plantilla que a día de hoy está oxidada. Podríamos señalar a varios jugadores como culpables de esta debacle que está viviendo el Barça, pero son muchos los factores que están dinamitando las aspiraciones de los catalanes. 

La falta de ideas en la creación de juego sí que está siendo un importante quebradero de cabeza para las pretensiones del entrenador holandés y, a pesar de que el equipo se ha reforzado en los ultimos años con Frenkie De Jong y Miralem Pjanic para tratar dar un toque de aire fresco a la sala de máquinas, sus llegadas no han resultado nada eficaces.

Es por eso que, según afirma el diario deportivo británico Sky Sports, uno de los jugadores que más sonaron en la pasada ventana estival está cogiendo mucha fuerza de nuevo para aterrizar definitivamente en Barcelona en las próximas semanas: Georginio Wijnaldum. Y es que el centrocampista holandés está cuajando una temporada sensacional a las órdenes de Jürgen Klopp en el Liverpool, pero el club aún no le ha puesto sobre la mesa una oferta de renovación ya que finaliza su contrato en el próximo mes de junio.

Todo apunta a que la llegada de Thiago Alcántara en el último periodo veraniego ha desequilibrado la balanza a favor del hispanobrasioelño, aunque todavía no haya despegado en el equipo. Si a ello le sumamos que el Liverpool tiene planeado lanzarse a por Milan Skriniar en cuanto se abra la ventana de fichajes, la salida de Wijnaldum cada vez se postula más apacible.

¿Y qué mejor destino que un equipo que necesita un constructor de juego como el comer? Ya en los meses de verano el futbolista se dejó querer por el club catalán y, dadas las circunstancias y su bajo coste (20 millones), ahora podría ponerse a tiro para aterrizar de una vez por todas en el Barça y convertirse en la primera noticia positiva en mucho tiempo en el vestuario catalán. Koeman va a por todas, sabe que tiene seis meses por delante para tratar de convencer a Messi con una reestructuración significativa de la plantilla que tendría su primer movimiento con la llegada de Wijnaldum en enero.