Koeman destripa y condena: recibirá por el crack 40 kilos en junio
El holandés lo tiene muy claro y ha puesto en jaque a uno de los fijos de los últimos años
Sin saber a ciencia cierta cuál será su futuro en el club, Ronald Koeman está dando forma a la revolución que tiene planeada en los seis meses que restan de competición de cara a la próxima temporada.
Sea o no el entrenador, el holandés está sentenciando poco a poco a los jugadores que menos le están convenciendo en este primer tramo de la temporada y, para sorpresa de muchos, Clément Lenglet se sitúa entre ellos. Aunque el año pasado formó un tándem imperial junto a Gerard Piqué en el eje de la zaga, esta temporada está ofreciendo un rendimiento que dista enormemente de lo visualizado en los cursos pasados.
Y es que en el momento en el que el central galo ha tenido que dar un paso al frente para liderar la defensa tras la lesión de Piqué, no ha sabido hacer frente a esa exigencia y, para colmo de males, se está convirtiendo en un martirio para los planes de Koeman. Tal es la desesperación del técnico holandés que en los últimos partidos está apostando por los canteranos Ronald Araújo y Óscar Mingueza en su detrimento y el francés cada vez tiene menos protagonismo en la plantilla blaugrana.
Lenglet viene de una temporada (la pasada) en la que disputó más del 90% de los minutos totales oficiales del Barça, pero este año apenas alcanza el 70% de ellos… y eso que no ha tenido contratiempos físicos hasta la fecha: todo se debe a su bajón futbolístico.
A pesar de esto, Koeman es consciente de que los seis meses que restan de competición pueden ser cruciales para que algunos jugadores cambien de actitud y traten de ganarse un hueco para una hipotética futura plantilla culé que será reestructurada significativamente tras unos últimos años esperpénticos. Lenglet podría ser uno más de ese elenco de jugadores que saldrán por la puerta de atrás del club ya que su valor no es nada desmerecedor: su precio oscila sobre los 40 kilos.
Obviamente es una cantidad muy atractiva para llenar las arcas de cara al desembolso que se prevé en Can Barça el próximo verano, pero Koeman confía en que el central recupere la versión que mostró el año pasado y se afiance como el líder de una zaga que ha perdido completamente su fiabilidad y su contundencia: otro problema para el técnico holandés.