Isco da el paso definitivo. Dispuesto a ello para salirse con la suya

El Real Madrid, alucinado con lo que le ha reconocido su estrella

En el Madrid son conscientes de qué hace tiempo que Isco dejó de remar por y para el equipo blanco. El malagueño tomó la decisión de dejarse llevar tras su choque frontal con Santiago Hernán Solari en el invierno de 2019. En aquel momento, en el que el entrenador blanco decidió apartar del equipo al centrocampista español, Isco murió deportivamente para el Madrid.

Si el club blanco no se ha deshecho de él hasta ahora ha sido, únicamente, por lo que le ocurre con la mayoría de futbolistas que no cuentan para el conjunto capitalino: la elevada ficha que los jugadores tienen en el equipo merengue, lo que hace muy difícil que estos abandonen el barco, ya que casi nadie puede igualar esas nóminas, y menos aún cuando salen como descartados del equipo que dirige Florentino Pérez.

Pero las cosas acaban de cambiar. Isco, tras varias semanas de reflexión, ha decidido dar un paso al frente y está decidido a rebajarse el sueldo si eso significa fichar por el Sevilla de su buen amigo Julen Lopetegui. La condición que pone Isco es que solo estará dispuesto a renunciar a su sueldo si el equipo que le firma es el Sevilla, ya que el centrocampista piensa que, si alguien puede recuperarle para el fútbol de élite, ese es Lopetegui, quien siente debilidad por el futbolista al que ya entrenó tanto en la selección española como en su breve estancia en el Real Madrid (justo antes de que llegase Solari y todo se torciese para nuestro protagonista).

El Madrid se ha sorprendido por la decisión de Isco, pues creían que a estas alturas el jugador apuraría su contrato en Madrid (finaliza en 2022). De ahí que Florentino haya puesto en marcha las conversaciones informales con el Sevilla de cara a conocer su disponibilidad por hacerse con Isco y, si esta fuese alta, tantear la opción de llegar a un acuerdo para hacerse con algún jugador interesante de su plantilla a cambio, como Diego Carlos o Jules Koundé.

Isco ha dicho basta y su etapa blanca, si el Sevilla así lo quiere, está más cerca de terminar que nunca. Su precio de mercado a día de hoy, 20 millones de euros, por debajo ya de los 30 que el Madrid pagó al Málaga en julio de 2013.