Y hasta aquí llegó Messi. Bartomeu ha tocado donde no debía

Cuando Bartomeu aprobó el presupuesto del Fútbol Club Barcelona para esta nueva temporada y superó un récord histórico pasando por primera vez del techo de los 1000 millones de euros, sabía que sería difícil de sobrellevar si las cosas se torcían porque muchos le acusarían de tener el presupuesto más grande de la historia del fútbol y no haber sabido aprovecharlo.

De hecho, desde enero esta era la acusación principal contra su gestión, pues con tal cantidad de dinero se había visto obligado a jugar partidos de Champions League con tan solo 14 jugadores de la primera plantilla. Todo un disparate teniendo en cuenta esos más de 1000 millones presupuestados para el curso.

Sin embargo, eso no es nada comparado con la que se le viene en las próximas semanas. Debido a la paralización de las competiciones el club, como tantos otros, está dejando de ingresar mucho dinero, tanto el obtenido en taquillas, como publicitario y en pocas semanas puede ser el que proviene de las televisiones que renegociaran los suculentos contratos a la baja. 

Las medidas que Bartomeu quiere poner en marcha tienen que ver sobre todo con la rebaja de los sueldos de sus jugadores que en total se va por encima de los 500 millones y que supone el 61% del total del presupuesto. Es por ello que el presidente entiende que son ellos quienes más deben apretarse para la solvencia económica del equipo.

Esto ha sido recibido por algunos de ellos con muy malos ojos y Leo Messi en particular es quien más contrariado se ha mostrado. El argentino está harto de recibir siempre esos mensajes de una directiva que considera del todo incompetente para llevar a cabo su trabajo de forma eficiente y exitosa. Por el momento y mientras la propuesta de Bartomeu no vaya a más el de Rosario no se pronunciará públicamente pero tiene claro que si la directiva del club mueve ficha el será quien saldrá a defender lo que considera sus derechos. Se avecinan curvas en Can Barça en los próximos días.