¡Golpe definitivo a Simeone! El plan macabro que tiene el Real Madrid

Diego Pablo Simeone es uno de los mayores enemigos del Real Madrid por varios motivos de peso. El primero, por sus declaraciones, desafiando y criticando al cuadro blanco. El segundo, claro, por dirigir al Atlético de Madrid, el rival local. Y, por último, por ser un competidor directo en la pelea por varios títulos. Se han enfrentado en dos finales de la Champions League, ambas, de gran recuerdo para los ‘vikingos’, y también, en una de Copa del Rey, además de en Supercopas de España y Supercopas de Europa.

Por supuesto, el técnico argentino también ha sido un escollo importante a la hora de intentar fichar varios cracks del combinado rojiblanco, que lo ha puesto imposible. En cambio, él sí ha conseguido pescar en el Santiago Bernabéu, llevándose a Marcos Llorente o Mario Hermoso. O en la pelea por convencer a algunos de los mejores futbolistas del planeta, y que eran objetivos prioritarios para Florentino Pérez, el caso de Joao Félix.

El canterano del Benfica estaba en la agenda de los mejores equipos de todo el planeta, y se mataban por contar con sus servicios. Pero finalmente escogió ir al Wanda Metropolitano, para ser el relevo de Antoine Griezmann, que se acababa de ir al Barça. 126 millones de euros fue el precio que pagaron por el crack que ahora tiene 21 años, y que no ha acabado de cuajar en La Liga Santander, pese a que ha dejado algunos destellos increíbles.

Calidad tiene a raudales, y eso nadie se atreve a negarle, pero es que no siempre es suficiente. Hace falta más regularidad y forma física, y ese es el motivo por el que el internacional luso no ha sido capaz de asentarse en el once inicial. Tuvo un tramo realmente bueno y destacado, en el que dejó grandes detalles, pero no ha bastado para convencer al ‘Cholo’, que de nuevo le ha relegado a la suplencia. Ángel Correa, a día de hoy, le ha comido la tostada.

Lógico, pues, que Félix, que también pasó por el Oporto, se plantee su fuga. Y en el Madrid están muy atentos a su disponibilidad.

No se descarta nada.