Florentino se niega y se lo dice a Zidane: su favorito, a la calle

El Real Madrid tiene una posición clara

Sobre la mesa del Santiago Bernabéu, con mayor o menor timidez, han llegado diferentes ofertas por uno de los jugadores protegidos por Zinedine Zidane y el jugador las ha rechazado todas. Y algunas eran bastante jugosas, lo cual satisface al míster, que sabe que puede contar con él para cualquier faena que se le presente al Madrid en la temporada (se presupone que habrá bastantes bajas por el coronavirus a lo largo de la temporada), pero no al club, que esperaba desprenderse de él.

Y más en plena época de pandemia, donde el dinero entrante es visto como un lujo en Concha Espina. Sin la afluencia de público a las gradas del coliseo blanco, el club ve mermados sus ingresos notoriamente durante LaLiga. Y además Lucas Vázquez no es considerado precisamente un ídolo en el estadio merengue, de hecho es uno de los jugadores que más críticas recibe de los aficionados del Real Madrid durante la temporada.

Y es porque su rol en el equipo no está del todo definido. Para Zidane está claro que no es un titular, sino más bien un hombre de club y de equipo, capaz de jugar en cualquier posición en la que el entrenador requiera un parche para determinados momentos, pero eso, que es bueno para ciertos instantes de zozobra, lo es menos cuando el equipo necesita recursos de estrella para sacar adelante los partidos (que los necesitará). Es ahí cuando la grada mira a Lucas y no ve un crack mundial resolutivo.

Lo cierto es que Lucas es un jugador de la cantera, cumplidor y que puede ocupar tanto la posición de carrilero como de extremo en el costado derecho. Unido a ello, su faceta de trabajo y defensa de las transiciones le permite a Zidane jugar con el gallego como elemento de cambio cuando los partidos se complican y debe cerrar al equipo. La oferta llegada desde Catar, por tanto, ha sido rechaza por el jugador ya que cuenta con la confianza del míster, pero Florentino Pérez ya le ha dicho a Zidane que no le va a renovar el contrato (se acaba en junio de 2021) y tendrá que salir gratis, justo lo que no quería el presidente.