Florentino Pérez tiene atado al artillero mexicano como plan B

El Real Madrid tendrá nuevo galáctico en agosto

En Chamartín siguen dándole vueltas al tema del delantero que todavía está por llegar de cara a la próxima temporada tras los incesantes rumores que vinculan a Erling Haaland con la Casa Blanca. Por el momento, en el Real Madrid son conscientes de que el delantero noruego es su prioridad pese a que no será nada fácil convencer al Borussia Dortmund al respecto de su llegada al conjunto merengue. Zidane quiere un nueve tras la mala temporada de Luka Jovic que podría abandonar el Santiago Bernabéu, y qué decir de Mariano Díaz que apenas ha entrado en los planes del técnico francés esta temporada.

El elegido si falla Haaland este verano es el delantero del Wolverhampton Raúl Jiménez, que ha sido tasado por el conjunto inglés en 50 millones de euros. El mexicano quiere dar el salto a un grande este mismo verano y no le faltan ofertas para hacer sus sueños realidad. A la propuesta merengue se le unen el interés del Manchester United, Inter de Milán, Juventus o Liverpool entre otros; por lo que su llegada a Chamartín será mucho más complicada de lo que podría pensarse en primera instancia.

Zinedine Zidane sigue fiel al plan de tener a todos sus pupilos entrenando en Valdebebas desde el primer día sin excepción alguna, ni si quiera respecto a los posibles fichajes. El técnico francés quiere hacer los deberes lo antes posible para que toda la plantilla alcance la forma física antes que el resto de competidores. Encontrar un sustituto de garantías para Karim Benzema está resultando un quebradero de cabeza para los blancos, por lo que el killer mexicano de 29 años podría ser la solución a los problemas con el gol que sufren en Chamartín.

Raúl Jiménez ha marcado esta temporada 22 goles y dado 10 asistencias en el conjunto inglés, unas cifras astronómicas que le catapultan a la agenda de los grandes, entre los que se encuentra el Real Madrid. El interés del Manchester United ha ido en aumento en los últimos días, por lo que su llegada a Chamartín dependerá también de lo paciente que sea el delantero con respecto a tomar la decisión definitiva sobre su futuro. Por el momento en Madrid siguen a la espera del noruego deseado, aunque confirman al mexicano como su plan B este verano por el que estarían dispuestos a pagar 50 kilos.